Alberto Núñez Feijoo: «Cuando ya uno se presenta por tercera vez, el único partido en el que milita es Galicia»

m. cheda SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

XOÁN A. SOLER

«Dos mandatos me parecen razonables, pero es que la situación política que estamos viviendo no es razonable»

03 abr 2016 . Actualizado a las 09:32 h.

Alberto Núñez Feijoo (Os Peares, 1961) confirmó ayer que en mayo optará a la reelección como presidente del PPdeG y que, por tanto, en las autonómicas de este año será el candidato de su partido a jefe del Ejecutivo gallego.

-¿Cuándo tomó esa decisión?

-No podría concretar el día...

-Pues si no lo sabe usted...

-Es que no apunto en un calendario. Tomo la decisión una vez que observo que no soy dueño en exclusiva de mis decisiones.

-¿Y eso qué fue: hace una semana, un mes, dos...?

-Me he dado un tiempo. Desde junio del año pasado estoy viendo que teníamos que hacer cosas. He hecho una remodelación del Gobierno, he variado e intensificado la política social porque he tenido oportunidad económica de hacerlo, he planteado los cuatro congresos provinciales... A partir de ahí, entre el último de esos congresos y la decisión de convocar la junta directiva para el 2 de abril, tomé esta decisión.

-O sea, sobre Semana Santa.

-Sí. Vi que el partido se renovó de verdad, que el partido mandó un mensaje de generosidad enorme y eso conllevaba una generosidad también por mi parte. Estoy satisfecho y tranquilo porque creo que he hecho lo que el partido quería y lo que a Galicia en este momento puede ser útil.

-Entonces, ¿el porqué es ese, hacer lo que el partido quería?

-Es evidente que, si un partido no quiere o está tibio en cuanto a por tercera vez mantener al mismo candidato, sería absurdo. Luchar para ser el secretario general de un partido en el que hay una parte del mismo que no te quiere eso se lo dejo a otros políticos. Yo no me veo así. He tomado esta decisión porque creo que en este momento quien tiene que elegir mi destino no soy yo, es Galicia. Tiene que decidir si quiere o no que siga siendo presidente. Y ya está. De la misma forma que en el 2009 me dio una oportunidad que nadie me había dado hasta la fecha, Galicia va a tener la oportunidad de decidir qué quiere hacer conmigo.

-Usted había dicho que dos mandatos eran suficientes...

-Sí, y lo reitero: dos mandatos me parecen razonables y suficientes. También es verdad que en política hay que estar a las duras y a las maduras. Y que la situación política que estamos viviendo no me parece razonable. La frivolidad se ha adueñado de la política, el postureo, el gesto, la frase, el Twitter, el Facebook, el plató los viernes por la noche... Bueno, creo que ante una situación excepcional las cuestiones razonables tienen que ajustarse.

-Dice la oposición que esta no era su primera opción...

-Ya. Pero es que estoy tan acostumbrado a lo que dicen mis colegas de la oposición... Cuando llegué a Galicia, que me quería ir; cuando me presenté a presidente del partido, que me mandaban otros; que fui un pésimo jefe de la oposición; luego, que iba a perder las elecciones en el 2012; después, que me iba porque tenía una oferta de la privada y estaba en la mitad de la puerta giratoria; ahora, que me quedo porque no tenía otra opción...

-Mientras meditaba, ¿ha recibido ofertas de la empresa privada?

-Vamos a ver... ¿Ha habido opciones en la empresa privada? Sí.

-¿Cuántas?

-Ni las he considerado ofertas porque no he seguido hablando.

-¿Cuántos tanteos, pues?

-Reitero: ha habido alguna opción de la empresa privada. ¿No se han concretado ofertas porque he dicho que no entraba en este momento en ahondar para comparar la oferta de la privada con el compromiso con la pública? Evidentemente, no he ahondado en eso. Pero sí ha habido opciones. Por cierto, las que han salido no son verdad. Y las que no han salido son verdad.

-La de Pemex y la de la Fundación Amancio Ortega entonces no eran ciertas. ¿De qué sectores procedían las verdaderas?

-Pregunta respondida en la otra.

-Vale. ¿Y la posibilidad de continuar su carrera en Madrid? ¿Esa cuando la abandonó?

-Esa la abandoné desde que fui elegido presidente de la comunidad, desde el 2009.

-¿De verdad quiere decir, presidente, que en estos meses no ha valorado en ningún momento lo de volver a Madrid?

-No.

-Pues en su partido no dicen eso.

-Las personas con las que yo hablo en el partido saben perfectamente que desde el 2009 soy el presidente de la comunidad. Creo que, si hubiese querido, podría tener posibilidades para estar en las Cortes Generales. Pero es que yo tengo una posibilidad real, que es ser el primer ministro de Galicia. Lo he dicho siempre, no he cambiado de opinión. Si coge todas mis declaraciones, verá que siempre he dicho que prefiero ser primer ministro de Galicia que otras posibilidades...

-En rigor, lo que ha dicho siempre es que es mejor ser primer ministro de Galicia que ministro de cualquier otra cosa, no que vicepresidente o presidente.

-Pues le añado que desde el 2009 mi compromiso exclusivo ha sido ser presidente de Galicia y lo sigue siendo. ¿Que hubiese tenido alguna posibilidad de estar en las Cortes? No se lo niego. ¿Que el presidente Rajoy ha sido muy generoso conmigo y alguna vez hemos hablado de otras posibilidades? Tampoco se lo niego...

-¿De cuáles?

-De otras. Hemos hablado de posibilidades sin ahondar en ninguna porque no hace falta explicarle a un gallego lo que es ser presidente de Galicia. Si el presidente fuese de Castellón, a lo mejor sí. Pero no es el caso.

-Entonces, ¿a Madrid le ha dicho usted adiós o hasta luego?

-Madrid es la capital de mi país, yo soy el representante ordinario del Estado en Galicia y esta es mi militancia. Ya cuando uno se presenta por tercera vez, créame que en el único partido en el que milita es el de Galicia.

-En cambio, hay en Génova quien asegura que si usted termina triunfando en Galicia y Rajoy fracasando en España, el ocaso del uno será el orto del otro.

-Mis opciones y mis cartas están echadas. Yo voy a apoyar al presidente Rajoy porque creo que es un buen primer ministro europeo y una persona fiable. Voy a seguir apoyándolo. Si los gallegos quieren, estoy a su disposición hasta el 2020.

-A su disposición lleva ya siete años casi. ¿De qué se siente más orgulloso de todo ese período?

-Quizás de haber resistido durante estos siete años el peor momento que puede tener un presidente de Galicia, de acompañar a mi pueblo en las decisiones difíciles y de empezar a ver ahora la luz. Esta misma semana el destino ha querido que saliesen todos los datos: el del crecimiento económico, el de la deuda pública, el del déficit, el de la inversión por habitante... Esta semana todas las señales han acreditado que lo que hemos hecho, salvando errores, ha merecido la pena

-Admite errores. ¿El mayor?

-Pensar que podíamos hacer las cosas con mayor rapidez. Y otro: los gallegos, si me pudiesen acompañar de la mañana a la noche, estoy convencido de que harían cosas similares a las que hago, y la verdad es que ha habido muchas veces en las que no he sido capaz de que entendiesen algunas cosas. Voy a seguir intentándolo.

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-¿Qué le queda por hacer?

-Yo voy a ofrecer estabilidad. Sabemos que tenemos 230.000 personas en el paro, pero hemos salido de la recesión y todos los indicadores invitan a la esperanza. Tengo un proyecto para una Galicia más ordenada, que ponga más en valor sus materias primas, que disponga de una alternativa real para el sector agrario y el forestal, donde el turismo sea una de las grandes actividades y el tren entre en la comunidad, con una estrategia aeroportuaria coordinada y transportes públicos mejorados, que transforme mucha más leche y siga siendo una de las primeras potencias pesqueras y conserveras del mundo... Tengo un proyecto también para una educación de calidad, de excelencia y bilingüe, y para uno de los mejores servicios de salud de las regiones europeas. Y quiero que la economía, ahora que ha empezado a funcionar, siga creando empleo.

-Ha dicho que «Galicia terá un Goberno estable ata o último día». ¿Significa eso que las autonómicas serán en octubre sí o sí?

-En este momento, ofrezco un proyecto y una estabilidad en el Gobierno que ninguna de las otras comunidades autónomas tiene al 100 %. Y esa estabilidad es la que me va a guiar para tomar cualquier decisión en el futuro.

-Ya, pero no ha respondido.

-Sí, sí. Ya le digo que no tengo ningún indicador que me diga que cambiar la fecha electoral prevista sea bueno para la estabilidad de Galicia.

-Enfrente aún no tiene rivales...

-No se preocupe, que serán puestos rápidos. Se decía que yo estaba esperando a conocerlos...

-¿Quién cree que encabezará la candidatura del PSdeG?

-No me atrevería yo a perjudicar a nadie en el PSOE por decir quién creo que va a ser mi rival en el PSOE...

-Hágalo pues en esa faceta de tertuliano que tanto le gusta...

-Estoy respondiendo a una entrevista como presidente.

-Lo del BNG lo ve más despejado, ¿no?

-Sí, aparentemente. Todo parece indicar que van a hacer lo que no han hecho nunca.

-Es decir...

-Poner a la portavoz, ¿no?

-¿Y En Marea?

-Creo que en En Marea hay alguien que quiere serlo y pretenderán que sea la renovación.

-¿Y se llama?

-Xosé Manuel Beiras.

-Seguro que en Ciudadanos no lo tiene tan claro, ¿verdad?

-Yo creo que en Ciudadanos no lo tienen claro ni ellos.

-¿Cómo de factible ve una tercera mayoría absoluta?

-Soy consciente de que sacarla sería una excepción, pero vamos a intentarlo.

-Dado que en España ya no queda ninguna salvo la suya del 2012, ¿qué le hace pensar que en Galicia puede ser distinto?

-Bueno, Galicia fue distinta en el 2009, cuando se anticipó entonces a la caída socialista. En Galicia hay muchos cambios políticos que luego se extienden en España. El fenómeno de Podemos se inicia aquí en el 2012...

-O sea, que ahora quiere ser usted el primero en derrotar a ese fenómeno de Podemos.

-No, yo en las manos encomiendo mi espíritu. Voy a hacer lo que Galicia me mande. ¿Que quiere tener un proyecto y estabilidad para ejecutarlo? Bien ¿Que, por el contrario, cree que lo mejor es dar paso a otra cosa? Si supiese a qué, probablemente, no me sentiría tan obligado por responsabilidad a presentarme. Lo que pasa es que, honradamente, no encuentro un proyecto alternativo. No sé cuál es. Si soy capaz de contarle esto a los gallegos y que los gallegos lo vean como yo, pues puede haber un tercer mandato. Y, si no, pues siempre ha sido y será un honor.

-En ese «y, si no», ¿qué hará?

-No lo he pensado. Lo que sí tengo claro es que siempre que ha habido unas elecciones he rendido cuentas. Pues tendré que rendir cuentas si no soy capaz de sacar esa mayoría...

-Otro congreso...

-Rendiremos cuentas. En este momento estamos trabajando para que no ocurra eso.

-El congreso que sí habrá seguro, el de mayo, tendrá como principal atractivo la designación de su número dos. ¿Qué perfil busca?

-Pues no va a ser fácil sustituir a Alfonso Rueda. He de buscar un nuevo secretario general y, después de trabajar siempre con uno, no será una tarea fácil. Pero me pongo a ello a partir de ya.

-Ya, ¿pero cómo debe ser?

-Somos el partido que más se ha renovado, con diferencia. Hay gente buena, hay gente joven...

-José Manuel Rey, Ángeles Vázquez, Pedro Puy y Agustín Hernández. ¿Podría estar entre esos cuatro nombres el de su nuevo secretario general?

-Entre esos podría estar, y entre otros también. La decisión no la tengo tomada.

-¿Se limitará la renovación al segundo peldaño o la habrá en otros ámbitos de la dirección?

-Vamos a hacer un equipo sólido. Tenemos gente con experiencia de Gobierno, de gestión, de ganar elecciones... Será un mix de esas tres cosas. Hay banquillo para sacar dos alineaciones.

«No quiero para mi país un presidente del Gobierno secuestrado»

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-¿Cuántas posibilidades da a Sánchez de llegar a la Moncloa?

-Sus posibilidades es la decisión de Pablo Iglesias. Alguien que pierde las elecciones siempre está en manos de los demás, y por eso creo que sería un grave error tener un presidente del Gobierno secuestrado por su escasa representación parlamentaria y por unos socios incompatibles entre sí, como Ciudadanos y Podemos. Eso es un Gobierno que mi país no se lo merece.

-Prefiere nuevas elecciones...

-Lo que prefiero lo he dicho desde el primer día: no creo en los vetos, no creo en que un señor que gane las elecciones tenga que ser la víctima de las mismas, no creo que uno que las pierda deba ser el presidente del Gobierno... En Europa esto no lo veo.

-Si hay generales el 26 de junio, ¿no será en realidad un fracaso de todos ustedes, de la política?

-Sí, está claro que sería un fracaso de la política. Unos con mayor responsabilidad y otros con menor responsabilidad.

-Y otros, quizás, eludiendo su responsabilidad...

-Honestamente, no lo veo así. Desde el primer instante he visto a un candidato a la presidencia del Gobierno que gana las elecciones y que ha dicho cosas que no ha dicho nadie, salvo Adolfo Suárez: estoy a disposición de formar un Gobierno de coalición, de que esa coalición ejecute un pacto electoral y de ponerle una fecha corta a esta legislatura.

-Conste que, al hablarle de elusión de responsabilidades, nadie las había atribuido. Y usted...

-Creo que nos conocemos, ¿no?