Zaragoza recibe más fondos del Estado que las siete ciudades gallegas juntas

serafín lorenzo SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Los anticipos de Hacienda
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El reparto de ingresos penaliza a Galicia en favor de las urbes de más de 500.000 vecinos

01 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El raquitismo financiero es un mal crónico de los ayuntamientos gallegos. Los motivos de esa insuficiencia de recursos que complica la gestión están diagnosticados desde hace tiempo. Los municipios resultan penalizados por un sistema de financiación que obvia factores como la dispersión y el envejecimiento poblacional, que inciden en el encarecimiento de la prestación de servicios. Es un peaje que también paga la comunidad autónoma, pero que en el caso de la administración local alcanza grandes desajustes que los concellos apenas han conseguido atenuar con la mejora de su capacidad recaudatoria en los últimos años. Las entregas a cuenta de Hacienda por la participación en los ingresos del Estado son la prueba del algodón de esos agravios. Las siete principales ciudades gallegas recibirán juntas en este 2016 un anticipo menor que Zaragoza, Sevilla o Valencia por separado.

La comparativa desnuda las desproporciones de los criterios de reparto, que favorecen a los municipios de más de 500.000 vecinos, que son los que recaudan más impuestos. Las urbes gallegas, con una población que suma 989.936 habitantes, ingresarán con este modelo de participación en los ingresos del Estado 248,4 millones. Zaragoza, que tiene 664.953 vecinos, percibirá un anticipo de 259,1 millones. Son casi 11 más que la suma de las ciudades gallegas, pese a que la capital aragonesa tiene 325.000 habitantes menos. La brecha es todavía mayor con otras urbes más pobladas, pero que tampoco llegan al censo de las siete gallegas. Así, Sevilla, donde residen 693.878 personas, ingresará este año una entrega a cuenta de 299,56 millones. Aunque la capital de Andalucía tiene casi 300.000 habitantes menos que las grandes ciudades gallegas, recibirá de Hacienda 51 millones más.

Hasta el triple por habitante

El mismo desequilibrio se observa si se comparan los ingresos que obtienen por esa vía las mayores urbes de Galicia y Valencia. Con 768.189 personas censadas, el anticipo a la capital del Turia será este año de 333,85 millones. Son 85 más que los que percibirán las siete ciudades gallegas juntas, pese a que Valencia tiene 221.000 habitantes menos. Y con un censo de 569.130 vecinos, Málaga se queda a menos de 20 millones de los 248,4 que ingresan las urbes gallegas.

Por descontado, las diferencias se multiplican a favor de las ciudades que superan el millón de habitantes. Madrid ingresará este año 1.538 millones en concepto de participación en los ingresos del Estado, y Barcelona, 1.066. El agravio aflora con más nitidez si se coteja el importe medio por habitante de las cantidades anticipadas por Hacienda. Las ciudades gallegas se mueven entre los 218 euros de Pontevedra y los 270 de A Coruña. Pero Zaragoza suma 389 euros por vecino; Málaga, 404; Sevilla, 431; Valencia, 434; Madrid, 489; y Barcelona, 664.

Pero esta misma discriminación se produce dentro de Galicia, porque los grandes ayuntamientos también ingresan anticipos mayores que los pequeños. Mientras las siete ciudades dispondrán de una inyección de 251 euros por habitante, los otros 307 municipios gallegos se repartirán 322,85 millones, con una media de 185 euros por vecino. Para compensar esa desproporción, la Xunta prima a los concellos menos poblados en la distribución del Fondo de Cooperación Local, dotado este año con 116 millones. En el plano general, Galicia, con el 6,2 % de la población del Estado, ingresa una porción equivalente al 5 % en el reparto de la tarta de los ingresos.

En el centro del debate político

La persistencia de un problema que la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) calcula que le ha costado a esta comunidad casi 1.400 millones desde la implantación del nuevo sistema de financiación, en el 2004, ha situado la exigencia de un nuevo modelo al frente del debate político. Tanto el municipalismo como las distintas fuerzas políticas coinciden en la necesidad de un sistema más justo, que corrija la brecha entre los ayuntamientos de más de 500.000 habitantes y el resto. Esta misma semana, el BNG ha propuesto una alianza de las ciudades gallegas para que reclamen de forma conjunta un modelo de financiación que no las discrimine.

Por su parte, la Fegamp pide incorporar criterios objetivos en el reparto de los ingresos del Estado, que permitan medir, por ejemplo, el coste de prestar los servicios en cada ayuntamiento. Pero también demanda la reforma de la participación en los ingresos de la comunidad autónoma, para clarificar la distribución del Fondo de Cooperación Local.