Mar Pereira: «El 'papel cero' es la meta; ahora estamos recorriendo el camino»

Mar Pereira es la directora de la Agencia de Modernización Tecnológica de Galicia (Amtega), el organismo responsable de dirigir y coordinar la digitalización de la Justicia (y de otros sectores) en la comunidad autónoma. En su opinión, las dificultades que surgen en los juzgados son las propias de un proceso de transición tan complejo como este. Lo importante, dice, no son los plazos, sino el espíritu de cooperación que están hallando en todos los estamentos.

-Desde distintos sectores se quejan de que la digitalización es precipitada. ¿Está de acuerdo?

-En realidad Galicia llega a este proceso con cierta ventaja. Tenemos transferidas las competencias en materia de medios y contamos con nuestra propia planificación desde el 2009. La digitalización no consiste en comprar aparatos informáticos; es un proceso de cambio y de organización. En ese proceso de cambio los profesionales de la Justicia tienen que ser un agente esencial. Esa es nuestra premisa de partida. De hecho, cuando se habla ahora tanto del expediente digital y del cero papel, tengo que decir que esa es la meta. Lo que estamos haciendo es recorrer el camino.

-Pero hay plazos perentorios.

-Los plazos no son lo esencial, sino el espíritu de cooperación. Tenemos muchísimos grupos de trabajo de todos los ámbitos profesionales que colaboran con nosotros desde el principio. Por supuesto que trabajamos con unos plazos que intentamos cumplir, pero sabiendo que esto es un proceso de largo recorrido. A veces simplificar el mensaje, diciendo que el expediente digital es lo que llega ahora, puede ser inexacto: estamos trabajando para que llegue pero es un trabajo que lleva tiempo, que necesita inversiones muy importantes y que hay que ir haciendo en diferentes fases.

-Como todas las reformas, también esta sería más fácil en un entorno presupuestario más generoso, ¿no?

-Bueno, en Galicia estamos haciendo un esfuerzo inversor importante. El primer plan tenía una dotación de 23 millones de euros, y el segundo, aprobado el año pasado, cuenta con 26 millones adicionales hasta el 2020. Es decir, que la Xunta tiene una inversión comprometida de 50 millones de euros hasta el 2020. Sí que es un gran esfuerzo, pero se debe a que se entiende que es esencial para esa Justicia más ágil, más eficiente, más transparente que todo el mundo está demandando.

-¿Han encontrado reticencias a abandonar el soporte papel?

-No. Creo que todos los profesionales, incluso los de trayectoria más larga, consideran imprescindible el objetivo de la digitalización. Y esto es lo mejor. Desde las Administraciones nos instan a tratarlo como una prioridad y a poner todos los esfuerzos en ello. Y en esto nos sentimos completamente acompañados. Otra cosa es que demanden un funcionamiento más ágil, que se resuelvan las incidencias que ocurren. También les requiere un esfuerzo muy importante de adaptación y de formación, pero igualmente en eso acompañamos a los colegios profesionales.

-¿Cuándo será una realidad el expediente digital?

-Desde el año pasado ya estamos trabajando para ponerlo en marcha. Una vez sentadas las bases, la labor actual es integrar toda la información y hacerla accesible a través del visor, que es la herramienta que se está usando ahora en Pontevedra que es donde se está pilotando. El visor es la ventana a toda la documentación que se haya generado en cualquiera de los lugares que aporten piezas al proceso. En el plano material, intentamos aportar dobles pantallas a todos los puestos de trabajo para que la digitalización sea más ágil y el visor gane operatividad.

-¿Se está consiguiendo armonizar los distintos programas que se manejan entre distintos sectores profesionales y entre diferentes comunidades autónomas?

-En un mundo ideal, todos tendríamos los mismos sistemas. Pero es verdad que cada comunidad tiene su historia y la evolución ha sido muy heterogénea. Tanto el Consejo General del Poder Judicial como el Ministerio de Justicia establecen mecanismos de lo que llamamos interoperabilidad, esencial para que, aunque tengas sistemas diferentes, la información pueda leerse de un sistema a otro. Esto es vital. En el caso de Lexnet, que tiene sus incidencias por el inmenso volumen de datos que maneja, lo que tiene de positivo es que es única para todo el Estado. La mejor integración es la que no hay que hacer.

---

---

---