Cientos de gallegos mueren solos cada año

maría santalla REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

A la vecina de Vigo hallada muerta en su casa el pasado sábado se sumó ayer otro caso en O Carballiño, el de una mujer de 78 años que vivía sin compañía

03 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El de la discapacitada de Vigo que el fin de semana fue encontrada muerta en su domicilio días después de que su padre, que ejercía como su cuidador, fuese hospitalizado, no es un caso aislado. Ayer mismo, una mujer fue hallada muerta en su casa de O Carballiño. Milagros F. B. tenía 78 años y vivía sola. Sus conocidos llevaban tres días sin saber de ella y finalmente sus temores se confirmaron: había fallecido.

Cada año cientos de personas mueren solas en sus viviendas en Galicia, una situación que aunque no es exclusiva castiga de forma especial al colectivo de mayores. 121.500 personas de más de 65 años viven solas en la comunidad, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística. De ellas, 24.500 han cumplido ya los 85 años o más, y de estas 22.300 son mujeres y solo 2.300 son hombres. Muchas cuentan con familiares o allegados que están pendientes de ellos. Otras no tienen esa suerte. Los servicios de emergencias certifican que es bastante frecuente que realicen salidas para abrir puertas de personas mayores que sufren caídas o accidentes de los que los familiares o vecinos alertan, aunque por fortuna casi siempre se les encuentra con vida.

En Vigo, a raíz del último caso, la jueza de instrucción número 3 mostraba anteayer su preocupación por la muerte en solo cuatro días de 15 personas que vivían solas en su casa. Otras 19 habían muerto la semana anterior en toda el área de Vigo. Una experta forense relacionaba esas muertes con el desarraigo en una gran ciudad como la viguesa.

Aunque no disponen de datos oficiales, en el partido judicial de A Coruña sí pueden afirmar que todos los meses se produce una media de 10 fallecimientos de personas que viven solas. Esa cifra puede aumentar durante los meses de invierno.

Otro caso reciente es el de un vecino de 66 años del barrio de A Carballeira de Ourense que fue encontrado muerto por causas naturales. Llevaba más de un día fallecido. En la capital ourensana todavía se recuerda un caso ocurrido en el 2008, cuando se encontró a un matrimonio muerto. La mujer, de 82 años, era la cuidadora del marido, de 80, que llevaba tiempo inmovilizado. Falleció ella y él después, y los cadáveres se encontraron días más tarde.

En Ferrol y su área de influencia se registran al año entre 120 y 130 muertes judiciales, que incluyen accidentes, suicidios y fallecimientos por enfermedad. En el caso de personas de edad avanzada que viven solas y aparecen muertas en sus domicilios la media anual se sitúa entre 20 y 25, según los datos facilitados por forenses del Imelga. Casi siempre se trata de personas con patologías crónicas que tienen una muerte súbita por una arritmia cardíaca provocada por una gripe o un catarro. Se ven bastantes casos de personas separadas, principalmente hombres, que tras ese trámite sufren un desarraigo y llevan una vida desordenada. Sus cuerpos suelen aparecer días o incluso semanas después.

En Viveiro, una mujer de 87 años apareció recientemente muerta en su casa después de que la familia avisase de que no tenía noticias de ella. En Mondoñedo hallaron muerta a una mujer de casi 60 años. En este caso la alerta la dieron los vecinos porque había estado enferma los días anteriores y no contestaba al llamarla. La encontraron acostada en su cama con la radio puesta.

Localización permanente y visitas periódicas del personal de ayuda a domicilio

En una sociedad cada vez más envejecida, las Administraciones impulsan programas de apoyo a los mayores.

Control voluntario

Localización por satélite. Para personas con deterioro cognitivo se ha puesto en marcha un programa de localización vía satélite que permite localizarlas y que está operativo las 24 horas.

Ayuda a domicilio

Un sistema de alerta. Resulta especialmente útil, especialmente en el ámbito rural, el programa de ayuda a domicilio, puesto que realizar determinadas tareas, la asistencia de los profesionales al domicilio permite detectar cualquier problema. También ocurre con los médicos de asistencia a domicilio, que pueden alertar a los servicios sociales en caso necesario.

Mi avizor

Control incluso desde el extranjero. 400 personas se benefician de una iniciativa desarrollada por la USC que permite a los familiares conocer el estado de salud de los mayores incluso desde el extranjero.

El servicio de teleasistencia beneficia a 5.000 mayores en la comunidad

A lo largo de los últimos años se han puesto en marcha en Galicia varios programas encaminados a satisfacer las necesidades de los mayores, y en especial de aquellos que viven solos. Uno de los de mayor trascendencia es el servicio de teleasistencia, para cuya gestión, igual que ocurre con otras iniciativas, la Xunta cuenta con el apoyo de Cruz Roja. Se trata de un servicio telefónico de uso muy sencillo que comunica al usuario, personas mayores o discapacitadas, con una central con solo pulsar un botón, de modo que si el usuario tiene algún problema puede avisar y recibe ayuda inmediata. Casi 5.000 gallegos se benefician de él.

Con información de Alberto Mahía, E. V. Pita, E. Eiroa, M. Rodríguez, Carmela López e Inma Eiroá.