También se están analizando los accidentes de tráfico en los que perdieron la vida los siete mayores de 65 años. En tres de los casos, los fallecidos eran conductores y superaban los 70 años. Los investigadores tratan de saber ahora si el estado psicofísico de esos automovilistas tuvo alguna incidencia en el siniestro.
La provincia de A Coruña fue la que registró un mayor número de víctimas mortales, con ocho fallecidos. Le sigue la de Lugo, con siete, y la de Pontevedra, con tres. Por segundo año consecutivo, la provincia de Ourense registró un mes blanco, es decir, sin fallecidos en la carretera.