Mata a su pareja ante los hijos de ella en Becerreá y se entrega a un concejal

La Voz LUGO / LA VOZ

GALICIA

ALBERTO LÓPEZ

El presunto asesino, de 29 años, le disparó a la mujer, de 40, con una escopeta

12 feb 2016 . Actualizado a las 11:19 h.

«Remateina». Así con esa contundencia le comunicó a un amigo por teléfono José Manuel Carballo Neira, o Chamaco, que había matado de un disparo a su mujer instantes antes. La víctima es Ana Gómez Nieto, de 40 años. Este vecino de Becerreá, de 29, acabó finalmente entregándose al teniente de alcalde de este municipio y responsable de Protección Civil, Claudio Vázquez. El primer caso de violencia doméstica de este año en Galicia se produjo pasadas las seis de la tarde de ayer en la aldea Herbón, parroquia de San Pedro de Tortes, a unos cinco kilómetros del centro de Becerreá. El presunto autor del hecho fue finalmente detenido por la Guardia Civil.

En el sangriento suceso también resultó herido un hijo de la víctima mortal, un joven de 16 años, que fue alcanzado por munición y que acabó en el Hospital Lucus Augusti. Con este muchacho también se encontraba su hermano de 17 años, que también acudió al centro sanitario, si bien no presentaba ninguna herida. Al parecer este joven, cuando se percató de la reacción violenta del presunto autor de los hechos se escondió en una habitación de la casa donde se produjo el suceso.

Las versiones de lo ocurrido ayer en el interior de la aislada casa donde se produjo el crimen son contradictorias en lo que respecta a los momentos previos al suceso. Se sabe que O Chamaco, como así lo conocían en toda la comarca de Becerreá, era cazador y que estaba en posesión de al menos una escopeta que fue la que utilizó para hacer un certero disparo. Es posible que esa acción se hubiese producido después de que la pareja tuviese una intensa discusión porque, al parecer, las relaciones no eran muy buenas en los últimos tiempos. De hecho, parece que ella llevaba ya algunos días fuera de casa. En el lugar varias personas dijeron que se había marchado a finales de la pasada semana.

José Manuel Carballo llamó previamente por teléfono a su pareja, con la que llevaba más de un año de relación, para decirle que había que arreglar la situación de desencuentro que tenían. Él contaba en su Facebook que se había casado con Ana el pasado mes de septiembre y algunos amigos le felicitaban a través de la red social. Ahora es posible, indicaron ayer varias personas, que ella le habría manifestado en algún momento la intención de separarse. Ese pudo ser el motivo de la llamada y el encuentro de ayer a la que ella habría acudido en compañía de sus dos hijos.

Discusión en la casa

Facebook

Una de las versiones del suceso apunta a que O Chamaco y Ana Gómez Nieto discutieron ayer en la casa. Entonces él se fue a una habitación, cargó la escopeta y disparó. Es posible que incluso hubiese advertido de lo que iba a hacer porque uno de los hijos se escondió en una habitación. Además, la mujer parece que intentó huir de la casa a toda prisa, y fue alcanzada por la espalda con el único disparo efectuado por Carballo Neira. La munición dañó en un dedo y también en una pierna al hijo menor de la víctima, que fue dado de alta tras ser conducido con su hermano al hospital de Lugo.

Un hijo llamó al 112

Del suceso tuvo conocimiento el 112 porque parece que fue uno de los hijos quién llamó a través del móvil. O Chamaco, por su parte, salió de la casa y llamó por teléfono a un amigo con el que había comido al mediodía. Le dijo: «Remateina». Seguidamente le dijo que había matado a su pareja y que únicamente se entregaría a Claudio. Se refería al primer teniente de alcalde del Concello de Becerreá y jefe de Protección Civil del municipio. En esa comunicación también explicó a su amigo que había perdido los nervios.

Dejó el arma apoyada en un roble cerca de la casa del crimen

El amigo de O Chamaco, en el momento de recibir la llamada de este comunicándole el crimen, estaba con el teniente de alcalde Claudio Vázquez, que acabó atendiendo telefónicamente a Carballo en una segunda llamada que efectuó. «Mateina e só me entregarei a ti. Ven a recollerme ao cruce de Armesto», le dijo. El punto de encuentro era en la carretera que va de Becerreá a Sarria, a un kilómetro de la casa donde ocurrieron los hechos.

El concejal pidió a O Chamaco que se mantuviera tranquilo y le preguntó por el arma. «Levo a escopeta», le dijo. Como la situación podría complicarse si el presunto autor de los hechos iba armado, el edil le solicitó que dejase la escopeta. Carballo le obedeció porque en el encuentro que ambos tuvieron ya no estaba armado.

La escopeta con la que fue cometido el crimen quedó apoyada en un carballo en la orilla de la carretera y junto con una cartuchera. La recogió posteriormente la Guardia Civil. O Chamaco se subió al coche que guiaba el teniente de alcalde y finalmente acabó en el cuartel.