El BNG debate si va a las gallegas en coalición con En Marea, como propone Vence y rechaza la UPG

serafín lorenzo SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Álvaro Ballesteros

Busca hoy un difícil acuerdo interno sobre la estrategia electoral

16 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Todavía con las heridas abiertas que provocó el nuevo varapalo electoral, en las generales del 20 de diciembre, el BNG trata de pasar página del modo más rápido posible, a través de un acuerdo interno sobre la forma de concurrir a las autonómicas del otoño. Pero la resolución del debate, que centrará hoy la reunión del consello nacional, no se presenta sencilla. Las distintas formaciones que conviven en el Bloque lo afrontan divididas sobre una estrategia que determinará el futuro de la organización, con independencia de la dirección en la que se resuelva. Mientras los independientes y corrientes como Abrente apuestan por ir a los comicios gallegos con En Marea, la UPG y Movemento Galego ao Socialismo abogan por acudir en solitario o con otras fuerzas nacionalistas. El portavoz nacional, Xavier Vence, se ha posicionado esta vez abiertamente a favor de la confluencia, lo que convierte el debate en un pulso al partido hegemónico del frente, la UPG.

La disputa llega engrasada por los intercambios de opiniones que se están registrando en las asambleas comarcales. Además de las dos posturas enfrentadas, esas reuniones han constatado que los posicionamientos de la militancia desbordan esta vez los cauces marcados por las distintas formaciones o corrientes del BNG. Espoleadas por unos resultados electorales todavía calientes, las bases están mostrando menos apego a la doctrina que dicta cada sensibilidad interna. A esa reacción apela Vence, que en el escrito que dirigió el jueves a los afiliados apremió a tomar nota de los cambios que se están produciendo en la estructura social y en el comportamiento del electoral. «Os resultados dos procesos electorais dos últimos anos, e de xeito singular os do 20D, obrígannos a reaccionar», advirtió, para subrayar que «as solucións que xa comprobamos reiteradamente que non funcionan é moi probable que tampouco funcionen no futuro».

Pero las opciones de que el giro aperturista que propugna Vence salga adelante pasan, precisamente, porque el sector más activo de la militancia, nucleado en torno a la UPG, rompa con el criterio más inmovilista que defienden ese partido y el Movemento Galego ao Socialismo. En su carta a las bases, el portavoz nacional se refirió a uno de los aspectos cruciales del debate, al asegurar que las dos opciones en discusión tienen como requisito preservar la autonomía del proyecto del BNG. Vence viene a enfatizar así que en ningún caso una eventual alianza con En Marea implicaría la disolución dentro del Bloque en esa coalición. Sería una alianza técnica.

El consello nacional explorará hoy la posibilidad de acordar, y votar incluso, una propuesta previa a la asamblea que convocará para el del 28 de febrero. Pero lo único seguro es que no se abordarán las dimisiones que piden militantes con el exdiputado Carlos Aymerich. Ese debate ha quedado solapado por la prioridad de la estrategia electoral.