La Guardia Civil detiene al ladrón del Códice para que ingrese en la cárcel

a. l. penide, x. melchor SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

XOÁN A. SOLER

Fernández Castiñeiras tiene que cumplir una condena de nueve años de prisión

11 dic 2015 . Actualizado a las 11:02 h.

El ladrón del Códice Calixtino ya está en prisión. Agentes de la Guardia Civil detuvieron ayer a Manuel Fernández Castiñeiras en su apartamento de A Lanzada (Sanxenxo) y le trasladaron a la cárcel de A Lama (Pontevedra) para que cumpla los nueve años de prisión a los que ha sido condenado por llevarse el famoso libro de la catedral de Santiago y casi 2,5 millones de euros de la caja fuerte del templo, sustracciones de dinero que cometió entre los años 2000 y el 2011.

La Guardia Civil recibió la orden de arrestar a Fernández Castiñeiras, exelectricista del templo compostelano, a requerimiento de la sección sexta de la Audiencia Provincial de A Coruña, la que tiene su sede en Santiago y donde fue juzgado entre el 19 de enero y el 5 de febrero de este año.

Tras aquel juicio, la Audiencia Provincial condenó a Manuel Fernández Castiñeiras a diez años de prisión. Él recurrió la sentencia ante el Tribunal Supremo, que hace hoy once días anunció su decisión de confirmar la condena. No obstante, rebajó la pena a nueve años de prisión porque estimó que era más beneficioso para el acusado considerar tanto la sustracción del Códice como la de los casi 2,5 millones de euros como un único delito continuado de robo con fuerza.

La de ayer no fue la primera noche que el ladrón del Códice durmió en la cárcel. Tras su detención el 3 de julio del 2012 pasó siete meses en prisión preventiva, tiempo que ahora le será descontado de la pena de nueve años que debe cumplir. Inicialmente ha sido instalado en el módulo de ingresos, en el que permanecerá hasta que la Audiencia Provincial determine si cumple su condena en el penal de A Lama o en el de Teixeiro (A Coruña).

Lo habitual es que los presos cumplan condena en el penal más próximo a su domicilio. Fernández Castiñeiras lo había fijado en su apartamento de A Lanzada, ya que no había regresado a su piso de O Milladoiro (Ames) desde que fue juzgado y condenado. En esta decisión, el tribunal provincial tendrá en cuenta la opinión del reo.

El exelectricista de la catedral de Santiago tiene otra pena de tres años por robar cartas a sus vecinos

Manuel Fernández Castiñeiras no solo debe cumplir estos nueve años de prisión. El Supremo también confirmó la condena a devolver los casi 2,5 millones de euros que robó a la catedral de Santiago. También le van a ser incautadas las propiedades inmobiliarias que compró con el dinero sustraído, porque se considera que fue blanqueo de capitales. En total, el apartamento de A Lanzada, un piso en O Milladoiro (Ames), dos plazas de garaje y un trastero. Además, por robar cartas a sus vecinos fue condenado en otro juicio por 190 delitos contra la intimidad, pena que recurrió y que se traduciría en un máximo de tres años de cárcel.