El PSOE suspende al diputado rebelde de Lugo y tramita ya su expulsión

s. varela, e. g. Souto LUGO / LA VOZ

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Pretenden que Martínez sea definido como tránsfuga para limitar sus votaciones y sus competencias, aunque su voto decidirá los presupuestos

07 nov 2015 . Actualizado a las 10:52 h.

El grupo provincial del PSOE en la Diputación de Lugo acordó ayer iniciar los trámites para expulsar a Manuel Martínez de sus filas y trasladar a la Comisión Antitransfuguismo del Estado sus últimas votaciones junto con los 12 diputados del PP que «dificultaron a acción do goberno provincial».

El malestar de los 10 diputados socialistas al final se hizo explícito y lo resumió con su habitual sinceridad el presidente de la Diputación, Darío Campos, tras darse a conocer las fotos de Martínez reunido con la popular Elena Candia en una gasolinera: «Onte rebentei, e Martínez coa súa postura foi moi desagradable de cara aos compañeiros e por moitos corenta anos de carné do PSOE que teña non pode actuar así e non encaixa neste grupo».

Los socialistas no le perdonan sus últimas votaciones en el pleno, que fueron en contra de los intereses del gobierno bipartito, e incluso contra el propio grupo del PSOE, al que dejó sin un asesor de Presidencia, puesto que iba a ocupar el presidente de la gestora del PSOE de Lugo, Lago Lage. Además, acusaron a Martínez de estar compenetrado con el PP. Campos dijo que Martínez pretendía presentar una moción sobre las retribuciones de los diputados y asesores, pero finalmente, insinuaron, fueron defendidas por los populares en el pleno. «Martínez votou co PP nunha operación política chabacana e asquerosa», dijo el portavoz socialista, Álvaro Santos.

Por estos actos de «deslealdade», el grupo provincial -en el que Martínez lleva 16 años- acordó iniciar los trámites para su expulsión. De manera cautelar queda suspendido hasta la resolución definitiva. El regidor de Becerreá tendrá diez días para presentar alegaciones. Además, trasladarán a los órganos de dirección provincial del PSOE «para que proceda como considere oportuno». Martínez hasta ayer solo tenía abierto un expediente en su partido a raíz de su votación del 24 de junio, que permitió que el PP accediese al gobierno de la Diputación.

Pero los diputados socialistas buscan poner en dificultad el futuro político de Martínez en la Diputación. Por eso, trasladan a la Comisión Antitransfuguismo sus últimas votaciones junto con las del PP con el fin de que sea declarado tránsfuga. «Buscamos que sexa definido como tal, que cada un teña o cualificativo e designación precisa e tamén poder condicionar o seu voto á hora de votar con outros grupos políticos», explicó Álvaro Santos.

Los presupuestos

La Comisión Antitransfuguismo -con diputados de los partidos en el Congreso- si dictaminase que Martínez es un tránsfuga, su actividad en la Diputación se vería complicada. Entre otros impedimentos, sus mociones no podrían ser apoyadas por ningún grupo, no tendría derecho a una asignación económica, o vería difícil acceder a las comisiones. Eso sí, Martínez mantendría su voto, incluso para asuntos trascendentes como la aprobación de los presupuestos. Campos ayer apelaba «á responsabilidade de Martínez e do PP para sacar adiante os orzamentos». Descartada la moción de censura -solo puede haber una por mandato-, la presentación de una moción de confianza podría salir a relucir si no salen adelante las cuentas del bipartito, aunque es un escenario que los socialistas no desean.

Campos y sus compañeros de grupo reprochan a Martínez que les faltase en varios momentos a su palabra de que no iba a dificultar un gobierno con el BNG, a pesar del veto impuesto por el Bloque. Señalaron que todos los diputados lo apoyaron como candidato a la presidencia «coa única condición de contar co voto favorable do BNG». Incluso, Campos desveló que le ofreció la presidencia si finalmente Martínez quedaba desimputado. Y posteriormente le agradecieron el paso que dio el alcalde de Becerreá para «recuperar a normalidade democrática en vez de primar o persoal» cuando firmó la moción de censura.

Pero los problemas volvieron a surgir cuando Martínez quedó fuera de la comisión de gobierno, de nuevo por veto del BNG, aunque Campos le ofreció llevar el área de Vías y Obras. Martínez declinó y los acontecimientos se fueron desbocando. Campos, con sinceridad, apuntó que no quiere volver a hablar «deste asunto, porque eu estaría encantado de que Manolo Martínez fose o presidente da Deputación e eu sacarme este marrón de enriba».

Martínez endosa el conflicto a Besteiro, porque «no supo estar a la altura de las circunstancias»

El diputado provincial y alcalde de Becerreá, Manuel Martínez, dice que el conflicto que lo enfrenta con su partido y con el Bloque se debe a que el secretario general del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, «no supo estar a la altura de las circunstancias». Martínez compareció ayer ante los medios de comunicación durante tres cuartos de hora para contar su visión de lo ocurrido desde que presentó su candidatura a la presidencia de la Diputación. No fue él quien incumplió, dijo como colofón de su amplio relato de encuentros, desacuerdos y pactos.

Martínez anunció que no se irá voluntariamente del PSdeG y, «salvo enfermedad», agotará el mandato como diputado provincial. Confirmó que no apoyará ni una de las propuestas que presente el Bloque en la Diputación de Lugo y hará todo lo que esté en su mano «para poner en su sitio» a los nacionalistas, a los que insiste en calificar de secta. Del expediente en el seno del partido, nada le ha sido comunicado oficialmente, aunque sí, a lo largo de todo el proceso desde el pasado verano, se lo comentó Pilar Cancela.

De los encuentros con la popular Elena Candia dijo que, al hilo de lo acontecido en la última temporada, tomó un par de cafés, como lo había hecho anteriormente incluso durante el anterior mandato. Explicó que las fotos con Candia corresponden a dos reuniones distintas. En una de ellas, la representante popular le dijo que lo iban a engañar y se jugaron una comida. «Parece ser que tengo que pagar yo». En la segunda, Candia le preguntó cuál sería su postura en el pleno de organización del gobierno, y le reiteró que no apoyaría «nada que pueda beneficiar al BNG». Atribuyó las fotos a actitudes mafiosas y recordó que ya hubo otras (en alusión a la de Juan Carlos González Santín en el Parlamento).

Gestión de Besteiro

Del secretario general del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, opinó que se equivocó en la gestión de este asunto, pero aún así cree que es un buen candidato a la presidencia de la Xunta. Entiende que la posición de Besteiro en este asunto está condicionada por un pacto con el nacionalista Xavier Vence. A Martínez le «duele el partido», en el que cree que Besteiro intentó meter por las bravas «a la tercera generación de socialistas», que ha llevado, dijo, al PSdeG a sus momentos más bajos. «Si hay una camiseta sudada en el PSOE es la de Manolo Martínez», afirmó.