Quince de cada cien coches inscritos en Galicia tienen más de veinte años
GALICIA
Tres de cada cuatro turismos superan los siete años de antigüedad, edad que Tráfico se ha propuesto que no rebasen la mitad de los automóviles en el 2016
07 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Una de las consecuencias de la crisis económica ha sido el envejecimiento del parque de automóviles, una circunstancia que, lejos de ser un dato anecdótico, tiene graves consecuencias sobre la seguridad de los conductores. Las cifras son elocuentes: según los datos de la Dirección General de Tráfico, en el 2014 la edad media de los vehículos en los que se desplazaban las víctimas mortales en España fue de 12,3 años. En el 2013 había sido de 11,3. Con la premisa de que la antigüedad de los coches multiplica los riesgos de accidente y agrava sus consecuencias, la DGT se ha propuesto disminuir la cifra de turismos de más de siete años que circulan por las carreteras españolas. Los titulares de vehículos de estas características han recibido una carta en sus domicilios en la que se les informa de las condiciones técnicas de su automóvil y se les recuerda que «la tecnología incorporada al vehículo contribuye a reducir significativamente el riesgo de fallecer o resultar herido grave en accidente de tráfico».
Esa línea roja de los siete años de antigüedad la superan en Galicia tres de cada cuatro coches en circulación, según los datos estadísticos de la DGT. En función de las cifras actualizadas del parque de turismos, solo el 23 % de los coches matriculados y en activo en la comunidad gallega lo han sido en los últimos siete años. El 77 % del parque móvil gallego tiene, pues, una antigüedad mayor de siete años y el 35 % ha superado ya los quince.
Es más, según las estadísticas de Tráfico, de los 1.454.168 coches matriculados en las cuatro provincias gallegas, 226.283 lo fueron antes de 1995 y, por lo tanto, tienen más de veinte años. Lo que, dicho de otra manera, significa que quince de cada cien coches que están en situación de alta en Galicia superan las dos décadas.
Si estos datos se comparan con los de toda España, los resultados, con ligeras variaciones, son similares. Tomando como referencia los siete años de antigüedad, el porcentaje de vehículos que superan esa edad en las carreteras españolas es el 74 %, un porcentaje un poco más bajo que el referido a la comunidad gallega. Solo el 26 %, por tanto, han sido matriculados en los últimos siete años, mientras el 14 % de los 22.029.512 coches que circulan en España tienen más de veinte años. Son, en total, más de tres millones los turismos de estas características.
Once años de media
La evolución de la antigüedad media de los vehículos ha crecido de forma vertiginosa en los últimos años. En el 2007 la edad media de los coches en España era de 7,8 años; en el 2008 creció hasta los 8,3; en el 2009, hasta los 8,7; en el 2010, hasta los 2010; en el 2011 fue de 9,7 y en el 2014 alcanzó los 11,28 años.
Según un informe de la consultora Audatex, en el año 2007, antes de la crisis, solo uno de cada tres coches que circulaban en España superaban los diez años. Esa misma entidad calcula que en el 2017 habrá 16 millones de coches que superen esa antigüedad.
Todos estos datos revelan que la crisis, además de haber hecho descender el número de matriculaciones -en el caso de Galicia se pasó, por ejemplo, de los 82.707 turismos inscritos en el 2007 a los 34.127 del 2011 o a los 29.351 del 2012- ha obligado a los conductores a mantener sus coches en circulación durante más tiempo. Los profesionales de la carretera constatan incluso que en los últimos años automóviles que ya habían sido descartados se han rescatado de los garajes y se han vuelto a poner en circulación. «Últimamente se ven muchos coches antiguos en la carretera, incluso algunos que ya estaban descatalogados», dice José Romero, empresario de autoescuelas.
Las bajas de vehículos comienzan a repuntar tras años de caída
En el año 2009 las bajas de vehículos tramitadas por la Dirección General de Tráfico alcanzaron un máximo histórico, con 1.135.642 unidades en toda España. A partir de ese año, la cifra de coches, camiones, furgonetas, autobuses y motocicletas que causaron baja se desplomó, una circunstancia que las asociaciones automovilísticas atribuían a la crisis, que no permitía a muchos ciudadanos adquirir un vehículo nuevo y obligaba a aprovechar los existentes. El ejercicio con peores datos en este capítulo fue el del 2011, cuando se formalizaron en las oficinas de la DGT 810.638 bajas.
Un año después, el Gobierno ponía en marcha el plan PIVE para incentivar la compra de automóviles y facilitar la renovación del parque móvil español. Seguramente apoyados por estas ayudas, los datos comenzaron a mejorar ese mismo año, y el 2012 se cerró con 882.751 vehículos dados de baja, según el anuario estadístico de la DGT. Un año después, esta misma fuente desvela una subida notable de las retiradas de vehículos del parque automovilístico activo. En total, 1.133.504 unidades causaron baja en el 2013. En el 2014, 1.100.176.
En Galicia se tramitaron 57.307 bajas en el 2010, se bajó a 42.699 en el 2011, fueron 45.569 en el 2012, 63.907 en el 2013 y 54.856 en el 2014. Este año, entre enero y mayo se dieron de baja 17.039 turismos.