Francisco Marín: «Siempre que se pueda, es mejor darse una ducha a un baño»

Antía Urgorri Serantes
Antía Urgorri REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

MIGUEL VILLAR

Dice que una lluvia fina y prolongada en el tiempo elevaría el nivel de los ríos

31 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La Confederación Hidrográfica Miño Sil ha decretado la prealerta por sequía. Aún así, el presidente, Francisco Marín Muñoz, deja claro que el abastecimiento está «garantizado» y que el nivel de los embalses se encuentra «ligeramente» más bajo de lo habitual.

-¿Qué tiene que pasar para que la prealerta se convierta en alerta?

-A finales de la pasada semana se activó el estado de prealerta en base a una serie de indicadores del caudal circulante por los distintos tramos de los ríos, que se encontraba ligeramente por debajo de la normalidad. Estamos ante una sequía meteorológica, llevamos un par de meses con precipitaciones por debajo de lo normal, lo que hace que la recarga de los ríos sea inferior, pero no quiere decir que estemos ante una sequía hidrológica. Con la situación actual, la demanda está garantizada. Los embalses están al 70 %, que es una media que es normal en los últimos diez años, pero que está por debajo de los últimos dos, que fueron bastante lluviosos.

-¿Cuándo se produciría un problema hidrológico?

-Entiendo que no llegaremos a esa situación. Si los niveles de los ríos siguen bajando, podría iniciarse alguna restricción de los usos que no son prioritarios. El abastecimiento es el uso que siempre se intenta garantizar. Sería dramático que siguiésemos dos meses más sin agua.

-El río Miño se podía cruzar estos días en Lugo por el bajo nivel.

-Es que aguas arriba de Lugo no hay presa. Cuando no hay capacidad de almacenar el agua, el río lleva el agua que lleva. La primera gran presa es Belesar. No puede llevar agua cuando no hay una presa para hacer aportaciones.

-¿Hay que racionalizar el agua?

-En los próximos días vamos a poner en marcha campañas de sensibilización. Es recomendable ducharse antes que bañarse, siempre que se pueda, no utilizar los electrodomésticos a carga completa, que los concellos reduzcan la intensidad y la presión de los baldeos nocturnos de calles...

-Acostumbrados a la lluvia, ¿los gallegos derrochan agua?

-No me atrevería a decir derrochar, pero gracias a Dios estamos en un entorno geográfico con unas aportaciones de este recurso muy generosas, y eso hace que no se mire tanto el agua que utilizamos, como sí se hace en otras zonas que son deficitarias.

-Los meteorólogos apuntan a que la tendencia es a vivir estaciones cada vez más secas.

-Las normas se revisan, y en el 2017 estamos obligados a revisar el Plan de sequía, a lo mejor tenemos que modificarlo. De momento hay que estar vigilantes, expectantes, y concienciados para dar un uso más racional del agua. Esperemos no llegar a mayores.

-¿Las lluvias de estos días están sirviendo para algo? ¿O tendría que llover mucho más?

-Toda gota cuenta. Es importante la que caiga aunque sea poca. Desgraciadamente en Ourense no está cayendo nada [por el miércoles], esperábamos que lloviera algo. La mejor lluvia es el orballo, una lluvia fina aunque no intensa, pero prolongada en el tiempo. Tampoco son buenas las tormentas que en pocos minutos descargan muchos litros, porque lo que producen son daños o arrastres, y más en época de incendios, que al final acaban contaminando las aguas.

-¿Los concellos han tomado conciencia de que hay que tomar medidas?

-Sí, todas las administraciones son conscientes. En nuestra demarcación la mayoría de los concellos son pequeños, salvo las capitales. El problema que ya nos estamos encontrando es aquellos ayuntamientos que toman el agua de manantiales de los montes cercanos. Como en Galicia tenemos un suelo bastante granítico, esos suelos responden tanto a las precipitaciones como a su falta. Como llevamos dos meses sin apenas precipitaciones, empieza a disminuir alarmantemente el caudal de las traídas. Estos pequeños núcleos de decenas o cientos de habitantes no tienen otro sustitutivo, y no hay posibilidad de darles un bombeo de un río cercano. Ahí es donde las administraciones tendrán que actuar. En esos concellos sí podría haber algún problema de abastecimiento, y habría que buscar alternativas como usar camiones cisterna.