La Xunta prepara un bono de 150 euros al mes para pagar parte del alquiler a necesitados

La Voz SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Álvaro Ballesteros

Un convenio del Gobierno gallego con Caixa Rural permitirá utilizar 20 viviendas vacías para realojar a familias desahuciadas

08 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El Consello de la Xunta planea aprobar mañana o bien en su reunión del 16 de julio la creación de una ayuda para pagar parte de la renta a gallegos que residan en pisos de alquiler y se encuentren en riesgo de desahucio por no poder hacer frente a los recibos. La subvención, bautizada como Bono Social Alugueiro, ascenderá a un promedio de aproximadamente 150 euros mensuales por hogar. Anoche, el Gobierno autónomo todavía desconocía cuántas personas se podrán acoger a esta iniciativa y también el umbral de ingresos por cabeza a partir del cual alguien dejará de tener derecho a solicitar el apoyo económico.

Sin aportar detalle alguno, la medida la deslizó ayer el jefe del Ejecutivo, Alberto Núñez Feijoo, en el acto de firma de un concierto con Caixa Rural Galega en virtud del cual la Administración utilizará 20 viviendas vacías de dicha entidad financiera para realojar a víctimas de lanzamientos judiciales. En esos inmuebles, de acuerdo con unos baremos ponderados de dinero a disposición y cargas arrastradas, los alquileres será gratuitos por norma general para familias con percepciones anuales inferiores a 7.455 euros y de entre 1 y 125 euros para aquellas que manejen cada ejercicio entre 7.456 y 29.825.

Además, el documento garantiza que la caja no desahuciará a gallegos que se hayan quedado sin recursos con los que abonar la hipoteca. Al contrario, les permitirá pasar en sus casas un año prorrogable hasta tres aportando de 0 a 75 euros mensuales, con ayuda complementaria del Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS). En este sentido, el mandatario gallego indicó que con la ampliación del programa social de vivienda «hoy es más difícil que una familia se quede sin vivienda en Galicia».

170 pisos

Se trata de un acuerdo igual al sellado el lunes con Abanca y similar al cerrado meses atrás con el popularmente conocido como banco malo (la Sareb). De modo que el parque de pisos desocupados en manos de la Xunta para su uso social ya se compone de 170 propiedades.

En la ceremonia de rúbrica del pacto con Feijoo, el director general de Caixa Rural Galega, Jesús Antonio Méndez, calificó de «moi importantes» los convenios de este tipo. «No podemos olvidar -matizó, sin embargo- que todas estas personas contrataron préstamos y se obligaron a pagar cuotas. Tenemos que articular mecanismos para facilitar ese pago, pero no podemos crear una sociedad en la que solo haya derechos y no haya obligaciones». Indicó que Caixa Rural Galega se caracteriza por ser una entidad privada con capital «cien por cien gallego» formada por más de 17.000 socios que reinvierte parte de sus beneficios en su propia comunidad social. Méndez destacó que la entidad tiene actualmente un bajo nivel de morosidad en materia hipotecaria. Por último, el director general de Caixa Rural Galega destacó que es cierto que hay personas a las que la crisis económica les afectó más que a otras. Por su parte, el presidente del Ejecutivo gallego destacó la «antigua, cordial y fructífera» relación de la Xunta con Caixa Rural Galega en los ámbitos social y financiero.

El PSdeG reaccionó a la noticia denunciando que la Xunta solo ha impedido 80 desahucios desde el 2013 hasta ahora.