Los populares aprueban solo con sus votos la ley que combatirá el abandono del suelo agrario útil

La Voz

GALICIA

Se trata de crear un nuevo concepto de reestructuración de la superficie agraria y de simplificar los dilatados procesos de concentración parcelaria

10 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El Parlamento gallego aprobó ayer la llamada Lei de Mellora da Estrutura Territorial Agraria de Galicia, un texto con el que la Xunta pretende combatir el abandono de la superficie agraria útil y que vio la luz tras contar solo con el apoyo de los votos del PP. Los grupos de la oposición, desde el Mixto al PSdeG, pasando por AGE y el BNG, votaron todos en contra no sin antes quejarse de que el Gobierno gallego no tuvo en cuenta sus aportaciones al rechazar las más de 150 enmiendas planteadas.

La nueva norma viene a complementar otras aprobadas con anterioridad, como la Lei de Montes o la Lei de Mobilidade de Terras, impulsadas desde la Consellería de Medio Rural, que dirige Rosa Quintana, con el objetivo de aumentar la productividad de la superficie agraria.

En el caso del texto que ayer recibió la luz verde de la Cámara, de lo que se trata es de crear un nuevo concepto de reestructuración de la superficie agraria y de simplificar los dilatados procesos de concentración parcelaria, que acostumbran a prolongarse en el tiempo durante más de una década.

Multas de hasta 3.000 euros

Otras de las novedades que incorpora la nueva normativa es que los propietarios de terrenos agrarias en situación de abandono estarán obligados a explotarlos y, si no lo hacen, deberán ceder estas parcelas en régimen de arrendamiento o ponerlas a disposición del Banco de Terras para evitar así que puedan ser caldo de cultivo de los incendios forestales. De no hacerlo, la Xunta se reserva el derecho a actuar de oficio con multas que pueden ir de los 300 a los 3.000 euros.

La oposición auguró el «fracaso» de la norma, y advirtió de que no se puede implantar un modelo sin contar con el consenso de las demás fuerzas. De la nueva norma echan en falta medidas concretadas para fijar población en el rural, frenar el cierre de explotaciones y la destrucción de superficie agraria útil.