El director del IVI de Vigo asegura que en cinco años, las mujeres mayores de 40 que acuden a estos centros aumentaron un 10 %
26 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La elevada edad lleva a numerosas madres gallegas a los centros de infertilidad. En 5 años, dice Elkin Muñoz, las mayores de 40 que acuden al IVI aumentaron un 10 %.
-Un dato escalofriante.
-Sí, una barbaridad. La edad es el principal condicionante del éxito en la reproducción humana, y desde que abrimos en Vigo en el 2015 la edad media de nuestras pacientes ha aumentado todos los años. Nos vemos obligados a luchar contra la edad de las madres para conseguir que la tasa de embarazo suba año tras año.
-¿Cuál es el problema de la maternidad tardía?
-A partir de los 40, lo normal es que una mujer no pueda recurrir a técnicas de baja complejidad, como la inseminación. Tendrá que ir ya a la fecundación in vitro (FIV) o a la donación de óvulos, estrategias más complejas y más caras. Y al diagnóstico genético preimplantacional, cada vez más importante.
-¿Por qué motivo?
-Porque permite seleccionar los embriones cromosómicamente mejores. La probabilidad del embarazo sube un poco, del 35 al 40 %, pero el riesgo de aborto cae del 50 al 10 %. Lo ideal de todas formas es no esperar tanto y poder recurrir a técnicas sencillas.
-¿Como la inseminación?
-Sí, por ejemplo. La tasa de éxito será mayor, se ahorrará dinero... Y los bebés que nacen de técnicas simples tienen mejor futuro perinatal que los de FIV o de donación, porque el embrión está menos expuesto a manipulación. De la misma manera que cuanto más joven sea la mujer, más longevo y sano será su hijo.
-Tanto en reproducción asistida como natural, claro.
-Sí. Los óvulos y espermatozoides de los 23 o los 24 años son los mejores porque no sufren aún el deterioro de la edad y llevan poco tiempo expuesto a tóxicos ambientales crónicos, como el humo. Es un error embarazarse tardíamente, aunque para eso estamos nosotros. Pero si las madres pueden planificar el embarazo para que se produzca antes, todo es más sencillo.