Pilar Rojo retrocede en su intento de revisar las reglas del juego, que penalizaban al BNG

d.s. SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

La propuesta para ordenar los debates en pleno que sembró la discordia le recortaba al BNG seis proposiciones no de ley al año

18 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La presidenta del Parlamento, Pilar Rojo, mostró ayer su disposición a «reconsiderar» su intento de reformar las reglas de juego que se aplican a las sesiones plenarias ante las airadas protestas de AGE, y especialmente del BNG, que con la revisión perderían parte de la capacidad de iniciativa de que disponen ahora mismo.

La marcha atrás que se dispone a dar Pilar Rojo, cuya propuesta inicial fue apoyada por el PP y el PSdeG, se escenificó ayer en la reunión de la Xunta de Portavoces, a la que el portavoz del Bloque, Francisco Jorquera, acudió con un recurso para exigir que quedara sin efecto la pretendida reforma, bajo el apercibimiento de que, de aplicarse, el BNG elevaría el correspondiente recurso al Tribunal Constitucional por entender que se recortan los derechos de sus diputados.

La propuesta para ordenar los debates en pleno que sembró la discordia le recortaba al BNG seis proposiciones no de ley al año, y cuatro más al AGE, para asignarle un cupo de ocho a las dos diputadas del grupo mixto. De igual modo, AGE y BNG perderían dos interpelaciones por año en pleno, otras dos preguntas urgentes, dos ordinarias, así como el derecho a preguntar en toda las sesiones de control al presidente de la Xunta.

Si en el caso de AGE los grupos mayoritarios interpretan que la propuesta es correcta, pues este grupo tiene dos diputados menos que cuando empezó la legislatura, el BNG entiende que en su caso no está justificado, pues el grupo es el mismo.

Jorquera se mostró esperanzado con la posibilidad de que se dé marcha atrás a la reforma. «PP e PSOE amosaron a súa vontade de negociar e falar -dijo- para ver si é posible recompoñer un acordo que racharon unilateralmente». Así que los nacionalistas se mostraron cautos a la espera de acontecimientos. «Semella que están dispostos a darlle unha vota», explicaron a su vez desde AGE, grupo que dice estar dispuesto también a acudir al Constitucional en caso de aplicarse el acuerdo que se puso sobre la mesa. La «reconsideración» de Rojo no hizo mudar la posición de PP y PSdeG.