Todavía hay margen para que la paralización no afecte a los plazos
11 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Las obras del AVE en la montaña de Ourense siguen paralizadas en al menos media docena de tramos. En algunos de estos tajos no se avanza en las excavaciones de los túneles desde diciembre y la situación no ha cambiado durante este semana, después de que se evidenciaran las diferencias de criterio entre el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) y las adjudicatarias sobre distintos modificados de proyecto que han puesto sobre la mesa y que el gestor ferroviario se niega a aceptar de forma automática. Los técnicos del ADIF están revisando desde hace varias semanas estos cambios siguiendo a rajatabla una consigna: no deben admitirse sobrecostes injustificados.
«Cada vez hay menos gente trabajando aquí», aseguraba ayer alguien relacionado con una de las obras más importantes que están paralizadas. De hecho, los dos túneles más largos del tramo Lubián-Ourense, el del Padornelo (7,6 kilómetros) y el de O Corno (8,8 kilómetros) tienen los trabajos de excavación parados desde hace al menos dos meses. Esta situación contrasta con obras como la vía izquierda del túnel de O Cañizo (de 5.369 metros), cuyo cale -el encuentro de los dos equipos de perforación- se produjo hace unos días.
En cualquier caso, el ADIF, aún manteniéndose en su posición inicial, espera llegar pronto a un entendimiento con las adjudicatarias. «Creemos que es posible llegar a un acuerdo. Aún tenemos un margen importante», aseguraba ayer un portavoz del administrador ferroviario para dar a entender que la paralización aún no afecta al plazo del AVE del 2018. En el plan de obras está previsto que en enero del 2016 deberían estar calados la mayoría de los túneles y terminados todos los viaductos proyectados en este tramo.
Por otra parte, el ADIF pondrá en tensión el día 25 la línea aérea de contacto de los nuevos tramos del eje atlántico.
El presidente del ADIF comparece hoy en la subcomisión del Congreso
El presidente del ADIF, Gonzalo Ferre, comparece hoy en la subcomisión de estudio del sistema ferroviario español que se creó después del accidente del Alvia en el Congreso de los Diputados, ante la negativa del PP y el PSOE de crear una comisión de investigación que depurara las responsabilidades políticas por el descarrilamiento, que provocó 79 muertos (una víctima mortal más está pendiente de ser reconocida).
Mientras, el Ministerio de Fomento ha modificado las condiciones para la puesta en servicio de las infraestructuras ferroviarias y el material rodante, un aspecto -la homologación del tren y de la línea- que está siendo discutido en la instrucción judicial.
Por otra parte, abogados presentes en la causa consultados por Europa Press creen que el juez debe llamar a declarar a los peritos que acaban de entregar su informe definitivo sobre las causas del accidente.