Estos números confirman que Lavacolla ya está apostando de hecho por esa especialización en tráfico internacional por la que apuestan los técnicos, y que Fomento ya trasladó a un comité de rutas que tiene pendiente el reto de impulsar la coordinación necesaria para que los tres aeropuertos gallegos mejoren su oferta, puedan crecer y sean realmente competitivos en el futuro.