Tres marcas se niegan a que se done a indigentes ropa falsa requisada

e. v. pita VIGO / LA VOZ

GALICIA

Un fiscal convenció a una jueza de Vigo para entregar las prendas a un albergue de ancianos pobres, pero Adidas, Hugo Boss y Levitas SPA exigen su destrucción

17 dic 2014 . Actualizado a las 12:36 h.

A las puertas del frío invierno, lo que iba a ser una buena obra navideña ha sido bloqueada por tres multinacionales de ropa de marca. Adidas, Hugo Boss y Levitas S. P. A. se niegan a que el Juzgado de lo Penal número 1 de Vigo done cientos de prendas falsificadas requisadas a dos piratas ya condenados y las entregue al albergue de los Hermanos Misioneros de los Enfermos Pobres de Teis. Esta oenegé de Vigo acoge a cientos de personas sin techo y a indigentes con incapacidades, a los que brinda cama y comida.

Las grandes marcas se han opuesto a la medida caritativa y alegan que si la jueza regala esos pantalones o zapatillas deportivas falsificados a las oenegés, es probable que algunas unidades se revendan y vuelvan a entrar en el circuito comercial, con lo que el efecto sería el contrario al de la sentencia. Por ello, han presentado un recurso en el que exigen al juzgado que dé marcha atrás en su iniciativa solidaria y que incinere todo el material decomisado, que sigue almacenado en los juzgados. Debe ser todo destruido para que se haga justicia efectiva.

La Fiscalía, que fue la que promovió la idea solidaria, ha contraatacado y enviado un escrito a la jueza en la que se opone a las pretensiones de las dueñas de la propiedad industrial de destruir la ropa. Sostiene que el temor de las marcas a una reventa podría ser neutralizado mediante el marcado de los logotipos con tinta indeleble, lo que les restaría todo su valor comercial. ¿Quién compraría unas prendas manchadas? Serían los propios misioneros los que marcarían las prendas y los representantes de las marcas podrían acudir al albergue a presenciar cómo son inutilizadas.

Ahora, la jueza debe decidir si da la razón a las multinacionales y destruye la ropa o se la cede a una oenegé.

Todo empezó el 18 de septiembre cuando dos jóvenes de Vigo aceptaron en una vista por conformidad una pena de cárcel y pagar 12.000 euros de indemnización por comercializar ropa falsa de cinco marcas, entre ellas Bikkembergs, Adidas, Levitas S.P.A. y Hugo Boss. Desde el 2010, compraban camisetas, zapatillas, jerséis o cazadoras en Portugal, le estampaban logotipos falsos y las revendían a través de una sociedad Meigonza C.B. y una página web que habían montado. Los implicados hicieron 200 ventas y transfirieron las mercancías a través de una agencia de transportes con cobro por reembolso. También ofrecían el género a mercadillos de la provincia de Pontevedra.

Dichas prendas fueron requisadas y quedaron bajo la custodia del juzgado. Durante la ejecución de la sentencia, la Fiscalía propuso a la jueza que las vestimentas se donasen a una oenegé como una obra caritativa de cara a la Navidad. La asociación elegida para recibir los productos fue la de los Hermanos Misioneros de Teis. Las prendas servirían para abrigar a ancianos pobres que no tienen a nadie que los cuide y viven alojados allí. La jueza dio el visto bueno pero antes de dar curso a la donación recibió una carta de 3 multinacionales que exigían destruir la ropa.