Ofensiva en Pontevedra contra el dopaje entre usuarios de gimnasios

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

GALICIA

La Guardia Civil detuvo a 2 personas e imputó a otras 7 por distribuir anabolizantes. Entre los investigados, un excampeón de culturismo

14 nov 2014 . Actualizado a las 10:42 h.

Efedrina, clembuterol, trembolona, insulina, boldenona, rubifén, testovirón... La Guardia Civil ha llevado a cabo en Pontevedra una de las primeras operaciones que se realiza en España contra lo que se denomina el dopaje de gimnasio. Esto es, se ha puesto el punto de mira, no en las instalaciones deportivas o en sus propietarios -de hecho, no consta que esté implicado ningún gimnasio-, sino en sus usuarios y clientes.

De este modo, han sido detenidas dos personas. Ambas, tras comparecer ante el titular del Juzgado de Instrucción número dos de Pontevedra, han quedado en libertad con cargos.

Asimismo, se ha imputado a otras siete personas, la mayoría de ellas vinculadas con el mundo del culturismo de Pontevedra. Entre los investigados, un entrenador personal, gerente de una tienda especializada en alimentación de deportistas ubicada en la calle Perfecto Feijoo y que ha sido campeón de España de culturismo en más de una ocasión.

Las pesquisas se centran en una supuesta infracción del artículo 361 del Código Penal, toda vez que existen sospechas de que, «sin justificación terapéutica», han suministrado, facilitado o proporcionado a deportistas sustancias prohibidas. La novedad es que, en este caso, no importa si los deportistas están federados o no, o si compiten profesionalmente o simplemente lo practican por recreo u ocio.

Esta investigación surgió meses atrás a raíz de una alerta farmacológica. Al parecer, se detectó que en una farmacia del entorno de la ciudad del Lérez se estaba comercializando un producto muy concreto -no ha trascendido cual- por encima de lo que se considera la media normal.

La Guardia Civil realizó un seguimiento y determinó que la persona que estaba adquiriendo, presumiblemente, con receta estas sustancias era un usuario de un gimnasio. Tirando del hilo, los agentes llegaron a la conclusión de que, a diferencia del narcotráfico, donde suele haber una separación de funciones entre los integrantes de la red, en este tipo de dopaje, los implicados supuestamente eran simultáneamente consumidores y suministradores de anabolizantes, esteroides y otros productos.

Las fuentes consultadas advirtieron de las graves consecuencias que tales sustancias tienen para la salud. Ya no solo se trata de que se incremente la masa muscular o la potencia física, es que su consumo sin control médico puede provocar desde tumores hasta impotencia, pero también alteraciones cardíacas, muerte súbita, parálisis de extremidades o deterioro cognitivo.

Esto son solo una pequeña muestra de los efectos nocivos que pueden llegar a tener, precisaron desde estamentos médicos. Todas las fuentes consultadas enfatizaron el riesgo que pueden correr aficionados al deporte que se acercan a estos productos sin conocer las consecuencias reales y dramáticas que acarrean.

Si la primera de las detenciones se produjo meses atrás, la segunda tuvo lugar ayer. Agentes de la Guardia Civil arrestaron a la segunda ayer, día en el que también se registró el negocio que regenta el excampeón de España de culturismo.

Un empleado de este negocio, si bien confirmó este extremo, aseguró que la Guardia Civil se limitó a interesarse por si había anabolizantes, que «son siempre las [sustancias] que se protegen más». En todo caso, dejó claro que «aquí no había nada», así como resaltó que «viene Sanidad cada tres por cuatro».

Ya por la tarde, el propio titular del negocio negó cualquier vinculación con la venta de anabolizantes y esteroides, asegurando que se produjo un registro rutinario de su establecimiento.