Feijoo sobre Pachi Lucas: «Nunca aceptarei que ninguén fale no meu nome»

Domingos Sampedro
Domingos Sampedro SANTIAGO DE COMPOSTELA

GALICIA

El presidente de la Xunta defiende su «honorabilidade» en el fraude de los cursos de formación, mientras la oposición le exige que aclare su relación con personas de la supuesta trama

13 nov 2014 . Actualizado a las 02:20 h.

Los grupos parlamentarios del PSdeG, AGE y BNG volvieron a actuar ayer como un auténtico tridente para hostigar al presidente autonómico, Alberto Núñez Feijoo, con el fraude de los cursos de formación. Lo hicieron interpelándolo de manera incisiva por su amistad con el empresario Pachi Lucas, señalado por la oposición por pernoctar alguna vez en la residencia oficial de Monte Pío y señalado en el sumario de la operación Zeta como presunto mediador para captar cursos de la Xunta. Feijoo contuvo los embates activando el ventilador contra la bancada izquierda y proclamando así su honorabilidad: «Nunca aceptarei que ninguén fale no meu nome».

Hasta en tres ocasiones deslizó el presidente gallego este mensaje en la sesión de control del Parlamento, en la que consumió más minutos de los establecidos reglamentariamente para dar explicaciones. El portavoz socialista, José Luis Méndez Romeu, fue el encargado de lanzar la primera ofensiva reprochándole a Feijoo que, la víspera, llegara a «vetarse a sí mesmo» al votar en contra de dar explicaciones sobre este caso, aunque sobre todo dirigió su ataque a la relación personal con el «comisionista» Pachi Lucas: «¿Actuou no seu nome?, ¿foi intermediario seu?, ¿estaba mandado para ser conseguidor?», inquirió Méndez.

El líder del PPdeG rechazó cualquier responsabilidad en la presunta trama de los cursos ocupacionales e incluso evitó referirse a Pachi Lucas por su nombre. Es más, al portavoz socialista le respondió Feijoo con cierta solemnidad para subrayar que «nunca tiven un mediador nin o terei na miña vida», del mismo modo que -añadió- «nunca aceptarei que ninguén fale no meu nome en ningún sitio», pues si lo hace lo hará a título personal y sin ningún tipo de respaldo.

Coruñés del año 2005

Hecha esa matización, Feijoo pasó al ataque, arguyendo que poner en duda su «honorabilidade» por el fraude de los cursos, sería como poner la de Méndez Romeu, de quien recordó que fue nombrado «coruñés do ano» en el 2005 por Gerardo Crespo, organizador de varios cursos ficticios a través de Azetanet. «Pareceríalle ben», preguntó retóricamente Feijoo, que se dijera que dicha relación «foi a causa de que non se investigara ningunha axuda» en la etapa del bipartito.

Con el portavoz del BNG, Francisco Jorquera, repitió el mandatario autonómico el mismo esquema. El dirigente nacionalista dijo que Feijoo tiene «responsabilidades» en el fraude de los cursos tanto como líder del PP como en calidad de presidente de la Xunta. Y advirtió que algunos datos lo «comprometen directamente», aludiendo al mensaje de móvil que figura en el sumario, enviado por Pachi Lucas a Gerardo Crespo el día que se celebraron las elecciones municipales del 2011 y que dice lo siguiente: «Comiendo en Beluso, presidente, mar... ¡Todo bien!».

Feijoo no aludió en ningún momento a este mensaje, y eso que Jorquera lo previno de que si no daba explicaciones tendría que exigir su dimisión. «Estou acostumado, xa ma esixiu hai quince días, ¿non se lembra?», repuso el líder del PPdeG. Sí repitió ante Jorquera lo expuesto ante Méndez, que nunca aceptará que algún mediador hable en su nombre.

Además, no se privó de activar el ventilador con el Bloque, evocando el nombre del exconselleiro Fernando Blanco, imputado desde el año 2011 en la operación Campeón. «Do mesmo xeito que eu non lle pido responsabilidades por ser compañeiro do conselleiro de Industria -remarcó Feijoo-, non acepto responsabilidade sobre persoas que non teñen nada que ver coa miña actuación política».

Con la viceportavoz de AGE, Yolanda Díaz, ocurrió otro tanto de lo mismo. Esta le preguntó al presidente si también le causaba «repugnancia» el fraude de los cursos o si solo siente eso con Andalucía, mientras Feijoo abundó que «ningunha amizade, nin sequera parentesco» le desviará de sus responsabilidades y de actuar en este caso, como hizo la Xunta, dijo, al inspeccionar a 26 entidades organizadoras de cursos y sancionar a cinco de ellas enviando el caso al fiscal.

De igual modo, Feijoo pidió prudencia a Díaz en sus acusaciones, a la vez que le reprochó que no se disculpara por todo lo que dijo del alcalde de Ferrol, José Manuel Rey Varela, desimputado después de cinco meses de la operación Pokémon. «Sen respecto e prudencia non hai política», sentenció el presidente.

Fábrica de Armas

Con todo, el nombre de Pachi Lucas -al que Yolanda Díaz aludió en un lapsus como Pachi Vázquez, diputado que se sienta a su lado- volvió a ser citado nuevamente en el pleno del Parlamento pocas horas más tarde. Y fue por gentileza de Méndez Romeu, al revelar que la Xunta «incorporou» a este empresario como mediador en la negociación del contrato de la Fábrica de Armas de A Coruña.

El conselleiro de Industria, Francisco Conde, acusó al PSOE de «mesturar temas» en su «cocteleira particular», arguyendo que el contrato era del Ministerio de Defensa, y no de la Xunta, mientras la Fábrica de Armamento también desmintió el extremo denunciado por el PSdeG.