El detenido por el atentado de Baralla tenía una lista con objetivos terroristas

redacción / la voz

GALICIA

El activista de Resistencia Galega disponía de datos de personas y organismos

07 oct 2014 . Actualizado a las 12:36 h.

Raúl Agulleiro Cartoy, el joven de 24 años detenido en Santiago por ser el supuesto autor del atentado terrorista cometido la madrugada del jueves día 2 en Baralla, tenía en su poder información sobre «potenciales objetivos de ataques terroristas», entre los que figuran personas, organismos públicos y empresariales, y sedes de partidos políticos y de las fuerzas y cuerpos de seguridad de toda Galicia. Agulleiro pasó ayer a disposición del juez del Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, Fernando Andreu, que ordenó su ingreso en prisión, comunicada y sin fianza. En el auto de encarcelamiento, el magistrado señala que Agulleiro habría colocado el artefacto explosivo «siguiendo las instrucciones de los dirigentes» de Resistencia Galega.

La información sobre objetivos terroristas fue incautada por la Guardia Civil en el registro que realizó en el piso de Agulleiro en Santiago el viernes, inmediatamente después de su detención. Los datos estaban guardados en los lápices de memoria confiscados en la vivienda y en los que también había archivos con instrucciones detalladas para la manipulación y activación de artefactos explosivos como el que hizo explosión en los bajos del Concello de Baralla y que causó importantes daños materiales.

Entre la documentación intervenida por la Guardia Civil también había un plano de la ciudad de Pontevedra en el que estaban marcados, con círculos rojos y con otras señales, los lugares en los que se encuentran las sedes del PP de Pontevedra (hay dos, la local y la provincia), el edificio del Ayuntamiento y la Residencia Militar, además de otros edificios oficiales de la ciudad del Lérez. En la operación policial también se intervinieron documentos de la organización terrorista, entre ellos la Guía de apoio á luita da Resistencia Galega, el Diccionario de sustancias de interese explosivo ou incendiario, y el Manifesto pola Resistencia Galega.

La aparición de esta documentación en poder de un supuesto terrorista de Resistencia Galega ha elevado las alertas, y las autoridades políticas de Galicia han mostrado su preocupación. El alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, del BNG, estaba sorprendido por el hallazgo del mapa de su ciudad en el piso del detenido: «Caínme dun guindo. En todo caso, non ten sentido ningún tipo de actitude violenta contra institucións neste momento, por tanto non estou de acordo con que se fagan estes atentados, porque non hai motivo nin xustificación para facelo. En ningún sitio, dáme igual que sexa Pontevedra, A Coruña ou Vilalba». Lores dijo que no había recibido ninguna advertencia policial: «Non tiña coñecemento ningún de nada diso. Aquí vivimos tranquilos, somos xente pacífica».

Los guardias civiles del servicio de Información de Galicia, con apoyo de especialistas antiterroristas desplazados desde la unidad central de Madrid, sospechan que Resistencia Galega tenía previsto cometer nuevos atentados en los próximos días, sobre todo después de encontrar un zulo con artefactos explosivos ya conectados a temporizadores y preparados para ser activados. Había una olla con entre tres y cinco kilos de material explosivo y dos termos que contenían entre uno y dos kilos de pólvora. Los artefactos estaban metidos en mochilas y estas en bolsas de plástico. El depósito clandestino estaba en una zona boscosa de O Pino, cerca de Santiago. A ese lugar acudió Agulleiro la misma noche del atentado de Baralla, pero lo hacía periódicamente, como se constató con la vigilancia policial a la que estaba sometido como uno de los miembros más radicales del movimiento independentista. Ese control permitió observar a Raúl Agulleiro abandonando su domicilio de Santiago el miércoles por la noche al volante de un Volkswagen Golf propiedad de su padre. Los agentes detectaron que regresó a la vivienda ya de madrugada, sobre las 4.40 horas del jueves. Aproximadamente a esa hora se produjo la explosión en Baralla.

Restos de explosivo en el coche

En el registro del coche se hallaron bolsas de plástico azules, iguales que las que había en el zulo, y unos guantes de látex. Un examen más detallado del Golf, con un perro adiestrado, permitió a los investigadores confirmar que en ese vehículo se había transportado material explosivo.

El juez Andreu destaca que la investigación de la Guardia Civil «ofrece indicios muy atendibles» de la perpetración del atentado y «de la participación culpable de Raúl Agulleiro Cartoy». Y justifica la prisión porque Resistencia Galega es «una organización terrorista capaz de procurar a sus miembros, una vez identificados, la cobertura necesaria para su huida y ocultación».

Precisamente hoy serán juzgados en la Audiencia Nacional otros tres terroristas de Resistencia Galega por la colocación de unos artefactos explosivos en Vigo.