Las víctimas del Alvia responden al maquinista: «Diga todo lo que sepa»

Pablo González
pablo gonzález REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

<span lang= es-es >Una carta para responder a la petición de perdón de Garzón</span>. Esta es la carta remitida al maquinista del Alvia en la que uno de los dos colectivos de víctimas responden a su petición de perdón y a su ofrecimiento para hacer algo por ellos. «Si algo puedo hacer...», les decía en su misiva Francisco José Garzón Amo, remitida a los afectados hace dos meses.
Una carta para responder a la petición de perdón de Garzón. Esta es la carta remitida al maquinista del Alvia en la que uno de los dos colectivos de víctimas responden a su petición de perdón y a su ofrecimiento para hacer algo por ellos. «Si algo puedo hacer...», les decía en su misiva Francisco José Garzón Amo, remitida a los afectados hace dos meses.

Los afectados pretenden que Garzón Amo delate al cargo de seguridad a quien dijo haber alertado de la peligrosidad de la curva de Angrois

16 sep 2014 . Actualizado a las 14:44 h.

«Nuestra vida empieza a terminar el día que callamos las cosas que importan». Con esta frase de Martin Luther King termina la carta que la Plataforma Víctimas del Alvia 04155 remite al maquinista Francisco José Garzón Amo, casi dos meses después de que el maquinista pidiera perdón a los familiares de los 79 fallecidos -hay uno más pendiente de ser reconocido- y a los heridos en el descarrilamiento ocurrido en Santiago hace un año y dos meses. En esta misiva recogen el guante del conductor del tren, cuando se ofrecía a ayudarles de alguna manera en el texto que les envió en el aniversario del accidente y que fue publicado en el libro de La Voz El peor día de Galicia. Tragedia en Angrois. «Si algo puedo hacer, si puedo llevarles algún consuelo de alguna forma... Me ayudaría tanto hacerlo..», escribía entonces Garzón Amo. Las víctimas, en su afán por que se investiguen todos los aspectos del accidente, responden así al ofrecimiento del todavía empleado de Renfe: «Sí que puede hacer algo por nosotros: diga todo lo que sepa. Ponga todos los medios, todo su esfuerzo y toda su valentía y honestidad para saber la verdad y poder hacer justicia», aseguran en la carta.

Los perjudicados por el accidente solicitan su colaboración en un aspecto clave de la investigación: «Diga quién es el responsable de seguridad al que usted nombró nada más ocurrir el accidente en su conversación con la central, en la que lamentaba que sus demandas no hubieran sido atendidas a tiempo». Le piden por tanto que delate al cargo de seguridad al que alertó de la peligrosidad y falta de seguridad en la curva de Angrois, como confesó en la conversación telefónica cuya grabación consta en autos. En esa charla, el maquinista asegura: «Ya le dije al de seguridad que esa curva era peligrosa, que un día nos la íbamos a tragar. Somos humanos y esto podía pasar».

Las víctimas se agarran ahora a esta frase y al ofrecimiento de Garzón Amo, a quien recuerdan que los afectados por el accidente necesitan «saber toda la verdad y que se depuren todas las responsabilidades». «Ayúdenos a esclarecer todo lo que ocurrió, aportando testimonios, documentación y todo lo que esté a su alcance a pesar de que le persuadan de lo contrario. Esto mismo se lo pedimos al resto de maquinistas y trabajadores de Renfe y el ADIF», aseguran en la carta al conductor del Alvia.

Quejas «en un cajón»

También constatan que otros maquinistas que se pusieron en contacto con la plataforma coincidieron en que cargos de seguridad fueron alertados de la escasa seguridad en la curva, en la que no se desplegó el ERTMS -el sistema que pudo haber frenado el tren- y tampoco había señalización lateral suficiente para alertar del brusco descenso de velocidad (de 200 a 80 kilómetros por hora). «Nos dicen que este tipo de quejas no se atienden y se quedan en un cajón. ¿Dónde están esas quejas? ¿A quién se las hicieron llegar?», se preguntan en lo que denominan «carta abierta al maquinista del Alvia».

Sobre el asunto del perdón al maquinista, principal motivo de su comunicación a las víctimas, la plataforma considera que pedir perdón «le honra aunque, como comprenderá, es un tema muy personal y cada víctima o familiar le perdonará o no». Pero sí que le aclaran que, para este colectivo de víctimas, hay otras culpas más allá del hombre que conducía el tren. «Estamos convencidos de que usted no es el único responsable, pero necesitamos su absoluta colaboración». «Tenga el firme convencimiento -añaden en la carta- de que lo único que puede hacer para paliar en lo posible este tremendo dolor y sufrimiento es que luche y nos ayude a esclarecer la verdad. Solo así mitigará su angustia y tendrá nuestro reconocimiento».

Una nueva declaración

Esta petición de las víctimas podría forzar una nueva declaración del maquinista, pues de hecho su defensa ya estaba valorando esta posibilidad hace unos meses. De esta forma, los abogados de las víctimas podrían hacerle todas estas preguntas en sede judicial. Esta eventual nueva comparecencia serviría para contextualizar el papel del maquinista a la luz de todos los hechos que se han revelado en la investigación y que en el verano del 2013 se desconocían. Lo curioso es que en las dos declaraciones anteriores nadie le preguntó por el cargo de seguridad al que se refieren las víctimas en su respuesta a Garzón Amo.