El debate sobre la reforma electoral se recrudece y acaba en insultos

Domingos Sampedro
domingos sampedro SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Políticos de todos los partidos participan en el intercambio de improperios

11 sep 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El Parlamento gallego se quedó ayer muy lejos de escribir la página más brillante de su historia, aunque puede que firmara la más chabacana. En el fragor del debate sobre la reforma electoral impulsada por el PP, bastó con que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, aludiera al BNG como «tonto útil» del PSOE para que prendiera la mecha. A partir de ese instante, se desató la furia y calificativos como «gilipollas», «comemierda» o «choni» fueron invocados por BNG, PSOE y AGE para arremeter contra Feijoo u otros miembros del Gobierno gallego.

Los portavoces de PSdeG, Méndez Romeu, y BNG, Francisco Jorquera, acudieron a la primera sesión de control del nuevo curso parlamentario decididos a hablar de la reforma electoral que impulsa el PP en solitario para convertir en alcalde al candidato de la lista más votada. Recordaron que Feijoo defendió en su programa que no se pudieran hacer cambios electorales sin una mayoría cualificada de al menos dos tercios. Méndez lo acusó de «rachar» un consenso democrático como si tuviera «nostalxia do partido único».

Feijoo se defendió proponiendo al PSOE un pacto «para cumprir os programas electorais», pero también aquel del año 2000 en el que los socialistas defendían un cambio normativo como el que ahora propugna el PP. En cuando al BNG, Feijoo sugirió que deje de ser «o tonto útil» del PSOE para investir a sus alcaldes constantemente, porque, además, los socialistas «os desprezan, insultan e ningunean».

Al final del debate, Jorquera pidió la palabra para exigir que «el tono útil de Rajoy», en alusión a Feijoo, retirara sus palabras, pues de lo contrario se vería obligado a decir que «Galicia ten un presidente gilipollas». Feijoo accedió a la petición, después de que la presidenta de la Cámara, Pilar Rojo, eliminara la expresión.

Pero la tensión continuó. Poco después, Yolanda Díaz (AGE) tachó a la conselleira Beatriz Mato de «choni», arguyendo que ella la llamó «caradura» fuera de micro. Mato lo negó y tildó de «clasista» que Díaz se refiriera de ese modo a un tipo de mujeres. Y todo eso ocurrió minutos antes de que el Pablo García (PSOE) rizara el rizo haciendo suyas las palabras de un supuesto amigo cubano para calificar al presidente de la Xunta de «comemierda».