Feijoo se aferra a la reforma electoral y desata la furia en el Parlamento

Domingos Sampedro
Domingos Sampedro SANTIAGO DE COMPOSTELA

GALICIA

El presidente de la Xunta y el BNG se acusan recíprocamente de actuar de «tonto útil» de otros, y el PSdeG pregunta al líder del PPdeG si tiene «nostalxia» del partido único

10 sep 2014 . Actualizado a las 14:30 h.

La doble reforma electoral que está impulsado el Partido Popular, de un lado para reducir los diputados autonómicos en Galicia y, del otro, para facilitar la elección directa de alcaldes en toda España, se convirtió este miércoles en el centro de gravedad de la primera sesión de control parlamentaria al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, que no solo defendió a capa y espada los cambios que pretende hacer el PP de un modo unilateral, sino que desató la furia del resto de la Cámara al recordar los viejos programas del PSOE y al tachar al BNG de «tonto útil» de los socialistas para que puedan gobernar.

Tanto José Luis Méndez Romeu, por el PSdeG, como Francisco Jorquera, por el BNG, coincidieron en recordar la época en la que Feijoo defendía que no se podían hacer cambios en la ley electoral sin una mayoría cualificada de dos tercios. El socialista aludió al programa del PPdeG del 2009, que incluía este compromiso; el nacionalista recordó que, en el 2006, los populares intentaron blindar esta mayoría cualificada en una reforma del Estatuto de Autonomía.

Feijoo no ocultó lo que defendía entonces, y reaccionó de inmediato retando a la oposición: «Sería bo pactar cumprir os programas electorais». Y dicho eso, recordó que el PSOE defendió en algún momento la elección de alcaldes de la lista más votadas. «¿Está dacordo en cumprir os programas do ano 2000 e do 2004?», le preguntó a Méndez Romeu, mientras que al Jorquera le recriminó que no considere legítimo que el PP, con 41 escaños, pueda promover una reforma electoral, cuando el BNG, con 7 actas, ayer mismo defendió otra.

Pero el empeño de Feijoo en defender la reforma electoral acabó por irritar a la oposición. Méndez acusó a Feijoo de «rachar» un consenso que se mantuvo durante los 35 años de democracia. «O PP quer cambiar a lei electoral como se tivera nostalxia do partido único», remarcó. Y con lo mismo, Jorquera denunció que lo pretendía el PP es «acabar» con el modelo proporcional e «impoñer o bipartidismo» justo cuando más cuestionado está.

Con las posiciones claramente enfrentadas, Feijoo fue todavía más allá, quejándose que el PP no pueda gobernar en Vigo, pese a ser el partido más votado. «¿Cree que levamos 8 anos consecutivos a falta dun concelleiro en Vigo para a maioría absoluta e non estamos lexitimados para gobernar?», le dijo a Jorquera, antes de señalar directamente al BNG como el causante de la situación. Tanto es así que Feijoo pidió el apoyo del Bloque para dejen de sentir «vergoña» por investir alcaldes socialistas y para que dejen de actuar como el «tonto útil» del PSOE, cuando este partido, abundó el presidente de la Xunta, «insulta, despreza e ningunea» a los nacionalistas.

El calificativo de Feijoo desató la furia en la bancada de la izquierda. Jorquera exigió que se retirara la expresión, tras acusar a Feijoo de actuar como el «tonto útil» en Galicia del Gobierno de Rajoy. La presidenta de la Cámara, Pilar Rojo, retiró ambas imputaciones, pero en ese punto la temperatura del debate ya había subido varios grados y provocó que AGE se sumara también a la gresca, con Yolanda Díaz denunciado que la conselleira Beatriz Mato la tachó de «caradura» y con ella devolviéndole la pelota calificándola de «choni».