Veinte familias se han acogido ya al nuevo plan de malnutrición infantil

m. cheda SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Feijoo admite disconformidad con el reparto del fondo del Gobierno para niños en dificultades, pero destaca lo «positivo» de que haya sido creado

18 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

En sus primeros días de funcionamiento, el nuevo programa de la Xunta para combatir la malnutrición infantil ya ha recibido una veintena de solicitudes de adscripción tramitadas en siete concellos de tres provincias, según datos facilitados ayer por la Consellería de Traballo e Benestar. La iniciativa, concertada el 4 de julio con la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) y la red autonómica de bancos de alimentos, consiste en proporcionar sustento a familias con menores a cargo en situación de vulnerabilidad. Dicho mecanismo viene a sustituir y a ampliar en su tiempo de vigencia a la propuesta de la oposición de abrir en verano los comedores escolares, alternativa que el Gobierno autónomo desechó para implantar la suya propia.

Básicamente, el modelo se estructura así: las familias con niños que carecen de dinero para comer se dirigen a los servicios sociales de los ayuntamientos, estos acreditan que la situación de penuria descrita se ajusta a la realidad y luego los bancos de alimentos, con cargo al peto de la Administración gallega, proporcionan productos a los solicitantes de la ayuda. Hasta el martes, sumaban doce los hogares de Valdoviño, A Coruña y A Bola (Ourense) que se habían acogido al plan. Entre el miércoles y ayer se sumaron otra media docena, aproximadamente, de Poio (Pontevedra), de la localidad ourensana de Lobios y de las coruñesas de Santiso y Mesía.

El departamento que dirige Beatriz Mato financiará este engranaje solidario, al menos en parte, con lo que Galicia va a recibir del flamante fondo extraordinario para prevenir la pobreza infantil habilitado por el Ministerio de Sanidad y Servicios Sociales: 723.868 euros sobre un total de 17,4 millones. Consultado acerca de la cuantía de ese cheque que Madrid ha decidido transferir a la Xunta, ayer Alberto Núñez Feijoo reconoció insatisfacción parcial con el criterio de reparto, un índice reconocido en el ámbito europeo no ponderado por variables de población.

Sin embargo, tras la reunión semanal de su Gabinete, el jefe del Ejecutivo autónomo prefirió resaltar el hecho «positivo» de que el Gobierno central haya dispuesto «por primeira vez» una partida «específica para abordar este problema». «Aínda que, como é natural, todo é manifestamente mellorable», apostilló.

El mandatario popular se agarró también a las últimas cifras oficiales difundidas por la Administración Rajoy, los cuales atribuyen a la comunidad una tasa de riesgo de pobreza del 23,2 %, para destacar que «estamos entre as seis autonomías con menor taxa, se mida como se mida». «En todo caso -se apresuró a matizar la euforia inicial- ter un índice de pobreza infantil é un pésimo dato. Calquera persoa, non se necesita ser político, que teña corazón sabe perfectamente que iso é unha eiva social que hai que solucionar».