Agustín Hernández, a la espera del bastón de mando

R. M. SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Santiago cumple un mes con un gobierno de mínimos pendiente de que se resuelvan los recursos de PSOE y BNG

02 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Santiago sigue en espera. Un mes después -se cumple hoy- de la inhabilitación de buena parte de su gobierno municipal, la capital continúa con un ejecutivo de mínimos en el que además solo dos de sus cuatro integrantes, el todavía alcalde, Ángel Currás, y su mano derecha, la concejala Reyes Leis, acumulan todas las competencias. Y así se mantendrá, previsiblemente, durante otra semana.

Son los cálculos que hace el propio Partido Popular, pendiente todavía de que la Junta Electoral Central acredite a los nueve concejales que han de recomponer un gobierno que asumirá las riendas de la ciudad bajo el mando del exconselleiro Agustín Hernández.

Es más que posible que el órgano electoral decida ya esta semana, pero después toca convocar el pleno en el que habrán de tomar posesión los ediles llamados a cubrir las vacantes, el mismo en el que se dará cuenta de la renuncia de Currás a la alcaldía -no al acta de concejal, de momento- y en el que Hernández tomará el bastón de mando.

«Voltar á normalidade»

Currás cuenta con que sexa «o martes, mércores ou xoves», decía ayer, convencido de que la Junta Electoral resolverá «favorablemente para o PP» después de las alegaciones formuladas por la oposición contra la designación de siete de los nueve concejales, los que no figuraban en la candidatura popular. «O demais son atrancos [da oposición], pedras no camiño por intereses persoais», afirmaba el todavía regidor en consonancia con quien ha de darle el relevo en la alcaldía, Agustín Hernández, quien ya se está poniendo al tanto de los asuntos municipales. De hecho, ayer se dejó ver por el Ayuntamiento. Y pidió «que se nos deixe voltar á normalidade», en clara alusión a las alegaciones de una oposición que defiende su decisión por «responsabilidade» y a la que el PP responsabiliza del retraso en la conformación del nuevo gobierno local desde que la Junta Electoral publicase, el pasado día 24, la propuesta popular para ocupar las vacantes corporativas.

Sin embargo, el PP también tardó medio mes en convocar el pleno en el que se dio cuenta de las dimisiones de los inhabilitados. La primera semana se consumió en el frustrado intento de Currás de mantenerse en la alcaldía. La otra la precisó Hernández para hacer su equipo y para que el Concello convocase el pleno de las renuncias.

Pero no será Agustín Hernández el único que habrá dependido en este mandato de los plazos de la Junta Electoral para ponerse al frente de la ciudad. También Gerardo Conde Roa estuvo a expensas de la deliberación de ese órgano. Precisamente, su toma de posesión como alcalde de Santiago se había retrasado hasta el 1 de julio (el del 2011) debido a los recursos electorales que interpuso en aquel momento la oposición.