Más de la mitad de las localidades de Galicia se sitúan así muy lejos de la tasa de reemplazo, la que permitiría a una sociedad garantizarse el relevo poblacional y que se fija en 2,1 niños por mujer.
El conjunto de Galicia se situaba en el momento del estudio por ayuntamientos en 1,1, pero en realidad en la actualidad ya ni llega a la unidad, frente a los 2,4 que se constataban entre 1975 y 1977, momento desde el que no ha dejado de caer hasta el 2003, tras lo que pese a un ligero repunte se está volviendo a hundir.