Paula Prado: «Tengo mucho ánimo, pero se me acaba la paciencia, aunque la conciencia está muy tranquila»
GALICIA
Alejada de los focos del Parlamento, y en el local de una pequeña comunidad de montes localizada en la parroquia de Oleiros del municipio coruñés de Ribeira, la portavoz del PP y coordinadora de su partido en Galicia para las elecciones europeas, Paula Prado, rompió ayer, en parte, el silencio que mantiene desde hace dos meses sobre el proceso judicial que la relaciona con un presunto delito de tráfico de influencias. A los periodistas que se interesaron por esta situación se limitó a decirles: «Tengo la conciencia muy tranquila». Estas declaraciones fueron realizadas al concluir el mitin que la llevó a la comarca de Barbanza a última hora de la tarde. Aunque antes de iniciarse este acto político, y en la entrada del edificio, sí que aseguró al alcalde de Ribeira, Manuel Ruiz, y rodeada de varias decenas de simpatizantes del PP: «Tengo mucho ánimo, pero se me acaba la paciencia, aunque la conciencia está muy tranquila».
Se trata de una respuesta que Prado le dio a Ruiz después de que este se interesase por la situación que vive. Sobre todo tras conocerse ayer que la Fiscalía dio su visto bueno a la jueza encargada del caso para que remita al TSXG la pieza del sumario relacionada con la diputada conservadora. Prado, que ayer intervino en Ribeira ante un centenar de simpatizantes, eludió mencionar la palabra corrupción en su discurso de 16 minutos. Además, estuvo arropada en todo momento por sus compañeros de partido en la comarca, tanto en el prólogo del mitin como en su epílogo. Es más, fueron varios los que defendieron la decisión rocosa de guardar silencio adoptada por la portavoz conservadora.