Xoán Martínez Cajigal (A Coruña, 1962) dejó su carrera como patronista en Caramelo para dar el salto a María Pita. En el 2006, fue elegido por el sector afín a la UPG para dar la batalla al líder local, Henrique Tello, entonces enfrentado a la dirección del partido. Era el presidente de la asociación vecinal de la Ciudad Vieja y perdió las primarias por un escaso margen que, al menos, le garantizó una plaza en la lista del Bloque en aquellas municipales. Era el número 6 y los restos de la ley D'Hondt le dieron asiento en el salón de plenos. El hundimiento del PSOE forzó el matrimonio de conveniencia con el Bloque y Cajigal obtuvo el control del área de Deportes. Su desembarco ya fue polémico. Ordenó una cuantiosa reforma de los despachos del palacio de los deportes. Su política de contrataciones también generó controversias, pero Cajigal tuvo un papel clave en la lucha interna que acabó con la caída de Henrique Tello y la derrota de su patrocinado, Afonso Sánchez Regueiro, ante el actual portavoz del Bloque, Xosé Manuel Carril.
Las escisiones le valieron repetir puesto en la lista del BNG, pero la victoria del PP le dejó en una difícil posición personal dentro del grupo nacionalista. La víspera del 1 de noviembre, día de Todos los Santos, del 2012, con la primera fase de la operación Pokémon ya en marcha, presentó la renuncia a su acta «por motivos persoais».
El propio Cajigal negó cualquier vinculación con la trama de corrupción, a pesar de que la renuncia coincidió con la de otro edil de Ourense que sí se encuentra imputado. Ahora, tras las declaraciones de Eduardo Aceña, la jueza Pilar de Lara podrá revisar los contratos firmados con Vendex en los años 2008 y 2010 y confirmar si hay o no irregularidades penales.