Casi 480.000 gallegos viven en el extranjero

Serafín Lorenzo SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Galicia terminó el 2013 con 15.746 emigrantes más que hace un año y 95.000 personas más que hace cinco

21 mar 2014 . Actualizado a las 04:15 h.

La sangría demográfica que mantiene encendidas todas las alarmas avanza sin que ninguna estadística muestre un punto de luz que sustente la esperanza de que la situación es reversible. Galicia no solo arrastra uno de los saldos vegetativos más pobres del mundo, sino que sale especialmente castigada de esa emigración de nuevo cuño asociada a la prolongada crisis económica. Los últimos datos del padrón de residentes en el extranjero, publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), cifran en 479.558 los gallegos asentados en otros países. En cinco años, coincidiendo con el desplome del empleo, la colonia gallega en el exterior se ha incrementado en 95.959 personas respecto al padrón del 2009, equivalente a la población de una ciudad como Santiago.

De los 383.599 gallegos contabilizados en el 2009 se ha pasado a los 479.558 actuales. Las provincias de A Coruña (166.623 residentes en el extranjero) y Pontevedra (140.145) aportan los principales contingentes, como corresponde a su condición de más pobladas. Pero el peso relativo en la colonia exterior es mucho mayor en las provincias de Lugo (66.088) y, sobre todo, de Ourense (106.702). En los últimos años también se han mantenido las diferencias internas sobre los destinos mayoritarios. Mientras la que procede de las provincias de A Coruña y Pontevedra se dirige hacia Europa, la originaria de Lugo y Ourense mira más hacia América.

43 asentados al día en el 2013

En el último año fijaron su residencia en otros países 5.187 coruñeses, 4.519 pontevedreses, 3.313 ourensanos y 2.727 lucenses. En total, el padrón de gallegos residentes en el extranjero se incrementó en 15.746 personas respecto al publicado a principios del 2013, lo que supone que cada día se asentaron en otros países una media de 43 personas de esta comunidad.

Los datos del INE no permiten precisar cuántos de esos nuevos integrantes de la diáspora gallega salieron para buscar trabajo. Aunque solo la mitad del total figuran en el grupo de 16 a 64 años, que aloja a las personas en edad laboral. En todo caso, la emigración exterior, que no aflora en el padrón, representa solo una parte del fenómeno, ya que todavía son más los gallegos que buscan su futuro en otra comunidad autónoma cuando dejan Galicia. En el primer semestre del 2013, cuando la emigración superó por vez primera a la inmigración, el 56 % de las salidas fueron a otros puntos de España. Otros estudios del INE acreditan que, además de mano de obra, en la nueva emigración Galicia pierde a generaciones en edad de contribuir al relevo poblacional. En el primer semestre del 2013, 2.436 jóvenes de 25 a 39 años dejaron la comunidad.

Emigrantes y nacionalizados

La difusión del padrón de residentes en el exterior llevó a la Xunta a emitir una nota aclaratoria sobre el cómputo del INE de nuevas inscripciones. Ese parámetro cifra en 22.329 personas el aumento de gallegos en el exterior, cifra que difiere de la comparación directa del último padrón con el del 2013, que arroja los 15.746 referidos. Subraya la Xunta que esas 22.329 nuevas incorporaciones «non deben identificarse co número de persoas que emigran, pois moitos dos primeiros nunca residiron en Galicia». Matiza que solo 3.662 estaban inscritas con anterioridad en su provincia, y que el resto nacieron en el extranjero. Achaca este desajuste a la coincidencia en el tiempo de dos procesos. Por una parte, la adquisición de la nacionalidad española, y después de la ciudadanía gallega, como consecuencia de la aplicación de la ley de memoria histórica. Por otro, por el regreso a sus países de origen de gallegos de derecho que nacieron fuera y que vivieron durante algún tiempo en Galicia. Como es lógico, esa decisión de retornar puede estar condicionada por la falta de oportunidades en esta tierra, aunque las motivaciones no afloran en la estadística del INE.

Como prueba de las distorsiones provocadas por las diferentes realidades que están detrás de la incorporación de gallegos al padrón llama la atención sobre el hecho de que solo 13 de los 4.275 inscritos en Cuba durante el último año nacieron en Galicia. En Argentina fueron 367 de 5.501 nuevos inscritos.