El PSOE emplaza a la Xunta a hacer borrón y cuenta nueva con la Casa de Galicia en Madrid
GALICIA
Considera un «esperpento» que el palacete, que cuesta un millón de euros al año, se destine a organizar conferencias sobre la prensa del corazón con invitadas como Carmen Lomana
19 feb 2014 . Actualizado a las 16:49 h.La utilización de la Casa de Galicia en Madrid para organizar un ciclo de conferencias sobre la prensa del corazón, que contó con la participación de personalidades como Carmen Lomana, fue la gota que colmó el vaso. El PSOE gallego considera un «esperpento» y una «auténtica tropelía» que un centro institucional que emplea a 13 personas y que cuyo funcionamiento le cuesta a los gallegos en torno a un millón de euros al año opere como un «ente fantasma» y albergue actividades de escasa rentabilidad, por lo que emplaza a la Xunta a hacer borrón y cuenta nueva, y a destinar esos fondos a otras materias de mayor utilidad.
La petición fue realizada este miércoles por la diputada socialista Marisol Soneira, que registró una batería de iniciativas en el Parlamento en las que sostiene que en el actual contexto de crisis, en el que proliferan a todos los niveles los recortes de gasto en los servicios públicos básicos, la situación del palacete de Casado de Alisal, adquirido en 1992 por casi 12 millones de euros al cambio, es insostenible.
Soneira puso de relieve que solo en salarios la Casa de Galicia desembolsa cada año unos 700.000 euros, entre los que figuran el sueldo de 63.000 euros que cobra su director. Y a ese presupuestos hay que sumar los consumos y gastos corrientes, que eleva el desembolso comprometido hasta el millón de euros, que es, además, la cifra que prevé ahorrar el PP en el Parlamento gallego con el recorte de 14 diputados. De hecho, hace un año el PSOE ya pidió formalmente cerrar la Casa de Galicia para ahorrar costes para intentar mantener los mismos escaños en O Hórreo.
«O problema non é o contenedor senón o contido», dijo Marisol Soneira, que se le está dando a la Casa de Galicia de Madrid, que en su opinión consiste en la organización de recitales y actividades de escasa repercusión. Desvinculó, además, la situación del palacete madrileño de otras instalaciones que tiene la Xunta en el exterior, como la delegación en Buenos Aires o la Fundación Galicia-Europa de Bruselas, que entiende sí tiene una utilidad que justifica que estén abiertas, entiende Soneira, que registró ya una pregunta oral sobre este asunto para su debate en pleno.