La ciudad es la única, junto con Santiago, en la que el Partido Popular no ha movido ficha para señalar su propuesta para la alcaldía
27 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.La ciudad más poblada de Galicia es la única con Santiago en la que el PP no ha movido ficha para señalar a su candidato a la alcaldía. Desde hace dos años, su presidente local, José Manuel Figueroa, no oculta sus expectativas, pero Feijoo mantiene la incógnita. En estas condiciones el aspirante decidió ayer convocar a la junta local a fin de iniciar un proceso de consultas con las bases del partido y también con entidades sociales. Su finalidad es testar sus posibilidades y plantear una propuesta concreta al presidente provincial, Rafael Louzán, de quien Figueroa es su más estrecho colaborador, y posteriormente al propio Feijoo, en cuyas manos está la decisión.
A expensas de cómo se materialice el proceso quedará claro si se invierte el sistema habitual, en el que la dirección del partido nombra al candidato, o bien Figueroa intenta imponerse con el respaldo de Louzán. Nada de eso quedó claro ayer en las declaraciones del aspirante antes de la reunión. Por el contrario, evitó hablar de sus aspiraciones, pero tampoco se descartó.
«Lo importante ahora es configurar un proyecto serio. Si después se elige a la persona idónea sería el encaje perfecto», explicó el también portavoz municipal. «Vamos a trabajar sin demasiada prisa, pero con cierto ritmo. Y cuando tengamos una opinión confirmada se la trasladaremos a los órganos del partido».
Aspiración pública
Por si acaso, dejó claro que hay «buena sintonía con Rafael Louzán, con el presidente Feijoo y con el vicepresidente, Alfonso Rueda, y eso facilita el proceso».
A lo largo de los dos últimos años Figueroa ha exteriorizado en ocasiones su aspiración a ser candidato a la alcaldía, algo que nunca ha conseguido pese a llevar más de un cuarto de siglo como concejal. En la etapa de Corina Porro fue su número 2 y la sustituyó tras su retirada.
Figueroa vaticinó ayer que el PP romperá en 2015 el maleficio que lo ha dejado en las dos últimas elecciones al borde de la mayoría absoluta, pero sin conseguirlo. Aunque en ambas obtuvo 13 concejales, el apoyo del BNG hizo alcalde al socialista Abel Caballero.
Como portavoz municipal, Figueroa conoce bien la situación del Concello y ayer expresó su convencimiento de que dentro de dos años será el momento.
No es esa una opinión muy extendida en estos momentos y quizás por ello tampoco aparecen muchos alcaldables. Hace un año Feijoo tanteó al exconselleiro Javier Guerra cuando lo cesó en la Xunta, pero la propuesta no se ha consolidado. También suenan como opciones el presidente de la Autoridad Portuaria, Ignacio López-Chaves, y la presidenta de Sepes y colaboradora de la ministra Ana Pastor, Lucía Molares. Por el contrario, hace unos días se autodescartó la delegada de la Xunta, María José Bravo.