El Sergas adjudicará la gestión de alta tecnología por 88 millones

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

La Xunta abre un concurso para que una empresa privada se encargue de los equipos para pruebas como radioterapia o diagnóstico por imagen

02 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Galicia estrenará el modelo de diálogo competitivo con la gestión de la alta tecnología del Sergas. La Consellería de Sanidade ha abierto un concurso por el que una empresa privada será la encargada de gestionar los equipos para todas las pruebas y procedimientos de diagnóstico por imagen, intervencionismo, medicina nuclear y radioterapia. La diferencia con el modelo actual es significativo. Ahora, quien decide cuándo y qué aparatos deben adquirirse es la Administración sanitaria, pero si un TAC, por ejemplo, se estropea, no hay ningún tipo de compensación por el tiempo que está inoperativo. El nuevo modelo pretende contratar «la disponibilidad operativa del equipo», explica el secretario xeral del Sergas, Antonio Fernández Campa, por lo que «se pasa a la empresa el riesgo de si algo funciona mal», sostiene.

El modelo de contratación también es diferente. En lugar de que las empresas presenten una oferta cerrada, el diálogo competitivo incluye negociar con las que opten a gestionar los equipos. Aunque en principio el presupuesto de esta adjudicación será de 88,3 millones en ocho años, «si logramos negociar y que nos lo garanticen por diez años, mejor», explica Campa. De momento no hay una fecha concreta para que todo el proceso termine -son pocas las empresas que reúnen los requisitos para acceder a este tipo de adjudicaciones-, pero el Sergas quiere «que esté adjudicado en la mayor brevedad posible». Al caer la responsabilidad en las empresas de la operatividad de los sistemas, deberán garantizar que implantan los equipos más adecuados para cubrir las necesidades. «Y si nos dan un equipo con la última tecnología mundial pero con dificultades de funcionamiento, no nos vale, y si el equipo no está disponible, no se le paga», aclara el secretario xeral de Sanidade.

La medida, que desde el punto de vista del Sergas pretende que las empresas den la solución tecnológica «más eficiente», para la oposición es una cesión al sector privado de la alta tecnología, lo que repercutirá tanto en el paciente como en el incremento del número de pruebas que se hagan.