Antes de que todo esto ocurriese, su madre se puso en contacto con la redacción de La Voz de Galicia en Carballo para indicar que su hijo iba a lanzarse de un puente cerca de Santiago, pero sin especificar cuál.
Ramón Smits, que tenía serias opciones a ser candidato a la alcaldía de su ciudad por su formación socialista, estaba considerado como una de las personas más valiosas de su grupo. Era asesor financiero y todo parece indicar que últimamente tenía serios problemas por temas profesionales, que, al parecer, incluso desconocían los miembros de su propio partido. En Carballo tenía una gran reputación entre la familia socialista y nadie se podía imaginar que pudiese acabar de esta forma. Su madre era originaria de Oza (Carballo), desde donde emigró a Holanda hace unos 40 años. Smits pidió que lo enterrasen en la tierra de sus abuelos.