La crisis que mantiene a los aeropuertos gallegos en su nivel de tráfico más pobre desde el 2005 no se explica sin el despegue que está experimentando Oporto, pese a padecer la misma coyuntura económica adversa. El borrador de la propuesta que Fomento entregó la semana pasada a los tres alcaldes y a la Xunta corrobora, por si había dudas, que la fortaleza del Sá Carneiro procede en buena medida de la débil competencia de tres terminales gallegas que operan de forma descoordinada. Este verano, Lavacolla, Alvedro y Peinador ofertan 135.031 asientos menos que en el 2012. Oporto, en cambio, gana 83.403. Más plazas y más asequibles. Viajar de Oporto a Madrid cuesta hasta 200 euros menos que desde Vigo.
Peinador, 93.000 plazas menos
Entre los gallegos, el que pierde más asientos es Peinador, con 92.930 menos que en la temporada estival del año pasado, un recorte del 23,9 %. Lavacolla cede 65.826, un 7,6 % menos que en el verano del 2012. La excepción es Alvedro, que aumenta sus plazas estivales en 23.725 gracias al acuerdo subvencionado con Air Europa, que junto a Air France (gracias a la exitosa conexión Vigo-París) son las únicas aerolíneas que crecen.
Más oferta con Suiza e Irlanda
Por destinos, los aeropuertos gallegos ofertan esta temporada de verano un 11 % menos de asientos en los vuelos nacionales. En los extranjeros, solo crecen las conexiones con Suiza e Irlanda.