Los siniestros en pasos a nivel han provocado 39 muertes en solo cinco años
GALICIA
La cifra de incidencias se ha ido reduciendo tras la supresión de medio millar de esos puntos en España desde el 2008
20 ago 2013 . Actualizado a las 11:44 h.El tractor que conducía Florencio Pérez quedó totalmente machacado por un tren Intercity la tarde del sábado en Arbo. Pero él pudo vivir para contarlo. En otros 41 accidentes registrados en pasos a nivel desde el año 2008 se registraron 39 fallecidos. Son datos de la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios, que constatan que a partir del 2011 la cifra de siniestros de gravedad en las vías españolas ha descendido de forma notable, de tal manera que de ser la segunda causa de accidente en el 2008, tras el atropello de personas (por la causa que sea) ha pasado a ser algo bastante infrecuente.
Cuando esa comisión comenzó a trabajar, a finales del 2007, el 25 % de los accidentes de tren registrados en España se localizaban en esos puntos negros. Ahora, con los datos provisionales del 2012 y 2013, el porcentaje está en el 8 %. ¿A qué obedece ese cambio? A un progresivo proceso de desmantelamiento de estos puntos negros, a través de varias fórmulas. A nivel de todo el Estado, se ha pasado de tener más de 3.700 pasos de distinto tipo (con y sin barrera, con señales, solo para peatones...) a poco más de 3.200. En todo caso, la mitad de ellos siguen siendo pasos con una seguridad bastante precaria: solo unas señales fijas, sin barrera de ningún tipo, como el de Arbo.
En todo caso, no es el tipo de paso en el que se producen más incidentes. Casi la mitad suceden allí donde hay barreras, algo que se antoja menos comprensible.
En el último año, el Ministerio de Fomento desembolsó 16 millones de euros en suprimir pasos. Apenas 1,2 fueron para Galicia, un 70 % en la provincia de Pontevedra, la que mayor número acumula. La inversión está lejos, en todo caso, de los más de 1.700 millones que anunció para esta tarea en el sexenio 2006-2012 la entonces ministra Magdalena Álvarez, incluyendo, además de eliminación de pasos, otras medidas de seguridad.
La reducción de cifras de siniestros localizados en esos pasos está vinculada también a una mejora en las líneas ferroviarias: en todas las nuevas de altas prestaciones (caso del tramo de Ourense a Santiago, por ejemplo). Antes de que se iniciara todo ello, los sucesos que se contaban en los pasos a nivel tenían un nivel trágico. Desde los 12 pasajeros muertos que iban en una furgoneta a trabajar en Lorca (Murcia) en el 2001, pasando por otros cinco en Hellín (Albacete) en el 2004, hasta los tres muertos en Valga (Pontevedra) en el 2007.