Las llamas arrasaron durante el día de ayer algo más de cien hectáreas
19 ago 2013 . Actualizado a las 10:12 h.El fuego no da tregua ni un solo día este verano a los montes de la provincia de Ourense. Ayer se registraron incendios forestales en Monterrei, Vilamarín, Carballeda de Valdeorras, Verín, Oímbra, San Cibrao das Viñas y Vilavella.
Además, los incendios declarados en la parroquia de Queirugás (Verín) y en la de Osoño, en Vilardevós, en la tarde del pasado sábado quedaron controlados desde las 15.36 horas de ayer. Según las estimaciones de la Xunta, han quedado arrasadas cien hectáreas. En los trabajos de extinción participaron un técnico, diez agentes forestales, 36 brigadas, once motobombas, cuatro palas, trece aviones y catorce helicópteros, entre ellos algunos de la BRIF. El problema ayer era el viento, que avivaba las llamas en tierras de Cualedro, concretamente en las cercanías del pueblo de Lucenza, quedando controlado a última hora de la tarde.
Monterrei
En Vilaza, municipio de Monterrei, se declaró el fuego a las 15.36 horas y, según las estimaciones oficiales, resultarían afectadas más de 20 hectáreas. Trabajaron un técnico, dos agentes forestales, nueve brigadas, cinco vehículos motobombas, dos palas, cinco aviones y seis helicópteros. Medio Rural recuerda a los ciudadanos que si ven fuego en el monte no duden en llamar al teléfono 085 o a la cuenta de Twitter @incendios085.
El Ministerio de Agricultura te envió ayer cinco aeronaves y dos brigadas de especialistas en labores de extinción para apoyar en el incendio de Vilaza, que se produjo al oeste del vecino casco urbano de Verín, en una zona de árboles y de matorrales, muy cercana a la autovía A-52. Así llegaron dos aviones anfibios que cargan 5.500 litros de agua, procedentes de la base de Lavacolla; otros dos de carga en tierra de 3.100 litros de agua, procedentes de Xinzo; un helicóptero bombardero que carga 4.500 litros procedente de la base asturiana de Ibias más las dos brigadas de refuerzo compuestas por 34 especialistas, con cuatro helicópteros con capacidad para cargar y derramar sobre el monte 1.500 litros de agua cada uno, que volaron desde las bases de Laza, en Ourense, y Tabuyo del Monte, en León. El ministerio también envió medios para actuar en otros fuegos en la provincia ourensana como los de A Mezquita, Oímbra, San Cibrao das Viñas, Vilamarín y Carballeda.
Vilamarín
En Vilamarín las llamas surgieron a las 16.37 horas y se llevaron por delante cincuenta hectáreas. Hubo que contar con la acción de tres agentes, quince brigadas, siete motobombas, dos palas, diez aviones y siete helicópteros.
El fuego estuvo próximo a la carretera N-525 y a los pueblos de Portamieiro, A Pena y Gándara. En A Pena acabó con un bosque de eucalipto y fue controlado para que no llegase a alcanzar las viviendas. Cerca del pueblo de Gándara hubo otro foco. En Portamieiro fue sacado por precaución un vecino de su vivienda porque se vale de una silla de ruedas. Según vecinos del pueblo, este incendio fue provocado intencionadamente con dos focos por lo que se iniciaron investigaciones para dar con el autor.
Carballeda de Valdeorras
En Carballeda de Valdeorras eran casi las dos y media de la tarde cuando se produjo un fuego en la parroquia de Casaio, en plena cuenca pizarrera. Quedó extinguido a las ocho y cuarto y se quemaron 1,8 hectáreas de monte raso. Fue necesaria la colaboración de dos helicópteros, dos vehículos motobomba cinco brigadas y tres agentes forestales.
En la parroquia de A Granxa, perteneciente al municipio de Oímbra, se produjo un conato minutos antes del mediodía y las llamas quedaron apagadas pasadas las tres y media de la tarde. Ardieron 0,06 hectáreas de monte raso.
Otro conato tuvo lugar en la tarde del domingo en la feligresía de Gargantós, perteneciente al término municipal de San Cibrao das Viñas, cerca de Ourense capital. El fuego fue detectado a las 15.23 horas y quedó apagado a las 19 horas. Ardieron 0,2 hectáreas de monte raso. En la lucha contra las llamas se contó con la ayuda de un avión, tres vehículos motobombas, cuatro brigadas y un agente forestal.