El paro de la planta de Nostián moviliza a los trabajadores del sector de la basura

Xosé Vázquez Gago
Xosé V. Gago A CORUÑA / LA VOZ

GALICIA

La instalación que recicla los residuos de A Coruña lleva doce días en huelga

10 ago 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Representantes de los tres sindicatos mayoritarios, de los trabajadores de Cespa, la firma responsable de la recogida de basura en A Coruña y su comarca; de la planta de tratamiento de residuos de Sogama y del vertedero de Areosa respaldarán el lunes al comité de empresa de Albada, encargada de la planta de Nostián, que gestiona la basura de A Coruña y su comarca.

La comparecencia conjunta, inédita por la importancia de las plantas de reciclaje implicadas, tiene el objetivo de respaldar a los trabajadores de la instalación coruñesa, que están en huelga desde hace doce días.

Los trabajadores de Nostián celebraron ayer una asamblea general en la que se acordaron nuevas formas de presión. El presidente del comité de empresa, Xosé Manuel Vilariño, ha subrayado que la huelga será «longa» y que no descartan organizar protestas en los actos de las fiestas de A Coruña, que llegan al fin de su semana grande. También pide a los vecinos que no paguen la tasa de basuras, porque no se está realizando el reciclaje que lleva incluido.

La huelga en la planta de tratamiento comenzó el 28 de julio. La empresa en la que se convocó la huelga, Albada, es distinta de la que se encarga de la recogida, Cespa. Sin embargo durante toda la semana pasada las calles de la ciudad se llenaron de bolsas de basura sin recoger, lo que causó numerosas quejas de hosteleros y vecinos.

También se produjeron numerosos incidentes provocados por grupos de encapuchados que atacaron los camiones de recogida o quemaron contenedores. La Policía Nacional presentó tres denuncias contra otras tantas personas a las que incautaron clavos que presuntamente iban a ser colocados en las rutas de los transportes.

A causa de los incidentes Cespa, en la que en ningún momento se convocó una huelga ni otro tipo de movilización, dejó de efectuar la mayor parte de la recogida, lo que desencadenó la acumulación de basura.

Los problemas solo se solventaron a principios de esta semana, cuando se reforzaron las escoltas de los camiones y Cespa organizó turnos extra por el día.

Sin embargo, los sabotajes han continuado, aunque ya dentro de la planta. Durante la madrugada del miércoles se produjo un incendio en la basura acumulada justo al lado de una de las palas excavadoras de la instalación. Fue extinguido antes de que afectase a la máquina. Dos noches antes aparecieron pinchadas todas las ruedas del coches de una trabajadora de servicios mínimos, que ha denunciado los hechos. La otra pala ha quedado inutilizada después de que su motor reventase. Alguien había vertido azúcar en él.