El maquinista del tren Alvia siniestrado en Angrois, Francisco José Garzón, se encuentra en libertad provisional con cargos de homicidio imprudente profesional con cargos por 79 delitos de homicidio imprudente profesional, además de numerosos de lesiones imprudentes. Tras escuchar su declaración, el juez le concedió la libertad provisional al no apreciar riesgo de fuga ni de destrucción de pruebas. Sin embargo, el magistrado Luis Aláez le impuso la obligación de comparecer semanalmente en sede judicial, y le retiró el pasaporte y la licencia para conducir trenes. Estas dos últimas condiciones se las impuso por un período de seis meses.
En el auto de libertad provisional del maquinista, el juez justifica la calificación de homicidio imprudente en las circunstancias en las que se produjeron las 79 muertes y las lesiones. Explica que los hechos se califican en concurso ideal, una figura que permite que un mismo hecho que causa varios delitos pueda ser juzgado como uno solo, aplicando la pena del más grave. En este caso, los 79 delitos de homicidio podrían juzgarse como uno solo, aplicando la pena en su parte más alta. El homicidio imprudente está penado con entre 1 y 4 años de cárcel.