Brasil evaluará las explicaciones de Renfe sobre el accidente de Santiago para decidir si autorizan su puja

Efe

GALICIA

Un consorcio español, en el que figuraban la operadora ferroviaria y Adif, compite en la subasta por el proyecto de alta velocidad entre Río de Janeiro y Sao Paulo, en el que se estima que se invertirán 13.000 millones de euros

01 ago 2013 . Actualizado a las 00:12 h.

Las autoridades brasileñas estudian las explicaciones de Renfe sobre el accidente del tren siniestrado en Santiago de Compostela para decidir si autoriza la puja del consorcio español en la subasta de la primera línea de alta velocidad del país.

El presidente de la estatal Empresa de Planificación y Logística (EPL), Bernardo Figueiredo, afirmó en declaraciones a periodistas que si son ciertas las explicaciones de Renfe, el accidente con 79 muertos «no haría inviable» la participación española en la licitación del tren que unirá Río de Janeiro y Sao Paulo. No obstante, Figueiredo aseguró que las autoridades brasileñas tendrán que «evaluar» los argumentos dados por Renfe, que comunicó que el accidente no ocurrió en un tramo de alta velocidad.

Según el pliego de condiciones, no puede participar en la licitación ningún operador que haya sufrido accidentes mortales en un período de cinco años en una línea de alta velocidad, donde se puedan superar los 250 kilómetros por hora. El tren que descarriló es un Talgo 250 Dual, un modelo híbrido que permite circular en vías de diferentes anchos: a velocidades máximas de 250 km/hora en el ancho de vía internacional UIC (1,4 metros) y a 220 km/h en el ancho español (1,6 metros).

El directivo señaló que dos consorcios han mostrado «gran interés» por la licitación que está prevista para el próximo 19 de septiembre: el francés y el español. El consorcio español está formado por las empresas públicas Adif, Renfe e Ineco, junto a las privadas Talgo, Elecnor, Cobra (ACS), Abengoa, Indra, Thales, Bombardier y Dimetronic.

El proyecto del tren de alta velocidad Río-Sao Paulo-Campinhas, el primero de América Latina, tendrá una longitud de 511 kilómetros, y se calcula que exigirá inversiones por cerca de 13.000 millones de euros. El responsable de la EPL confirmó que, a pesar del accidente, se mantiene la fecha de la subasta para el próximo 19 de septiembre.