Un proyecto estrella en los años del bum del ladrillo

La Voz

GALICIA

12 jun 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El proyecto del Barrio do Cura quiere convertir una zona degradada del Casco Vello en una lujosa urbanización a pie de mar. La idea arrancó en el 2003, cuando muchos pensaban que la vivienda era una buena inversión porque el precio iba a subir eternamente. El exjugador céltico Valery Karpin fundó una promotora junto a su socio José Crespo y, en ocasiones puntuales, con el exfutbolista Míchel Salgado, y su promotora se lanzó a comprar céntricas parcelas.

Entre sus operaciones destaca la compra del antiguo asilo de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, situado a solo 50 metros del olivo que es símbolo de la ciudad. El emblemático edificio de la calle Pi y Margall es el buque insignia del Barrio do Cura. Los promotores querían demolerlo tan pronto tuviesen la licencia y confiaban en que el Concello aprobase rápido el plan urbanístico para la zona.

En marzo del 2010 presentaron el proyecto del Barrio do Cura, del arquitecto Alfonso Penela, en el Club Financiero de Vigo. Preveía una inversión de 130 millones para la creación de 300 a 400 viviendas (un 29 % sociales), un túnel de Torrecedeira al Paseo Alfonso XII, un hotel de lujo, un gran parque cerca de O Berbés y una plaza con mirador.

Diez años después, el asilo sigue en pie, a veces okupado por indigentes. Hubo varios incendios. Aún no hay orden de demolición. Hace un mes, el pleno de Vigo dio luz verde a la aprobación inicial del PERI del Barrio do Cura y estiman que las obras empezarán en el 2014. Lo harán bajo el aliento del BBVA y Santander, principales financieras del proyecto, y que reclaman 40 millones en conjunto en préstamos hipotecarios. Karpin dice que busca inversores y en marzo frenó una subasta que casi hunde la mitad del proyecto.

En mayo del 2010 cayó el primero de los grandes planes de Karpin. Compró el colegio Cluny para convertirlo en un centro comercial y una urbanización de lujo. Pero no obtuvo el cambio de su uso dotacional y su cotización se esfumó. La subasta por 36 millones quedó desierta y se lo adjudicó NCG.