Un mando de Salvamento admite que llevar el Prestige a A Coruña era su primera opción

Pablo González
Pablo González A CORUÑA

GALICIA

Uribe cree que la maniobra era complicada, pero el puerto coruñes podría solucionar «rápidamente» el trasvase de la carga

23 abr 2013 . Actualizado a las 13:42 h.

El principal responsable de las operaciones de salvamento durante la gestión del Prestige, Jesús María Uribe, admitió ante el tribunal que su primera opción era llevar el petrolero al puerto de A Coruña y que trasladó sus opiniones a su superior, Javier Gárate, para que las expusiera en el gabinete de crisis.

Uribe, que en unas conversaciones que publicó La Voz apostaba claramente por el refugio, no dio marcha atrás en el juicio, pero sí matizó la posibilidad de llevar el buque al pantalán petrolero de Repsol relatando las dificultades que entrañaba. Consideraba que la opción de la dársena coruñesa era la que más se ajustaba a la filosofía de los puertos refugio, «pues podía solucionar rápidamente los problemas del barco» y era la mejor alternativa «para un trasvase rápido». Sin embargo, el exdirector de operaciones de Salvamento Marítimo cree que había que estudiar las condiciones del buque, pues estaba sobrecalado y podía superar el límite para autorizar su entrada en la rada de A Coruña. Precisó que la maniobra debía realizarse ayudado por la máquina y «muchos remolcadores», pero considera que sería «complicada» por los giros de 90 y «hasta de 180 grados» que debía realizar el petrolero para atracar en el pantalán. El factor meteorológico tampoco ayudaba, pues el tiempo era «horrendo».

El propio abogado del Estado llegó a preguntar quién conocía mejor el puerto de A Coruña. Uribe respondió que el práctico, precisamente la persona que desaconsejó llevar el Prestige a A Coruña y que pidió que le eximieran de responsabilidad si se optaba por acogerlo en la dársena coruñesa.

Nunca Máis se interesó por su célebre frase «O jodemos A Coruña o jodemos toda la costa», preguntándole si pensaba que refugiando el buque se podía contener mejor el vertido. Uribe respondió que la mejor opción de salvamento pasaba por un trasvase rápido de la carga y reconoció que la opción del refugio era su «opinión» en aquel momento, aunque recordó al letrado de la plataforma ciudadana que lo hacía con «salvedades».