Circulaban detrás de un amigo que quería dejar su moto en casa
07 abr 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Andrés Filgueirea Sanestevan (22 años) y Carlos Pérez Romeu (27) estaban la noche del viernes en Viladonelle, en la zona rural de Neda. Un tercer amigo les dijo que iba a dejar la moto en su casa, abajo en el valle de O Roxal. Ambos le dijeron que irían a recogerlo, que saliera delante. Un cuarto amigo les dejó su coche, un Peugeot 206 rojo, y se pusieron en marcha. Pasaba de las diez de la noche. El motorista llegó a su casa y comenzó a preocuparse al ver que sus dos amigos no llegaban en el coche. Tampoco respondían a las llamadas de teléfono, por lo que deshizo el camino con la moto y en las conocidas como curvas de O Roxal, que son utilizadas en el recorrido del rali de Ferrol, observó que el coche de sus amigos se había despeñado. Las luces traseras del Peugeot indicaban su posición. Él corrió y vio que sus amigos estaban malheridos o muertos dentro del coche. Inmediatamente dio la voz de alarma y poco después llegaron los bomberos de Ferrol, Protección Civil y ambulancias, pero ya nada se podía hacer. La autopsia reveló que el turismo, al colisionar con un eucalipto, les aplastó el cráneo a ambos. El mismo amigo motorista dio aviso a la familia, que vive cerca, y a los pocos minutos también llegaron para confirmar la peor alternativa. El alcalde de Neda, Ignacio Cabezón, consolaba ayer al padre de Andrés en su casa de Viladonelle, y a la novia del muchacho, que lloraba desconsolada.
El tanatorio de Artabria en A Gándara reunió en la tarde de ayer a cientos de amigos de los dos jóvenes fallecidos, velados en este centro. Serán enterrados esta tarde. Andrés, en Viladonelle, después de las cinco, y Carlos, que residía en Sillobre (Fene), después de las cuatro en el municipal de As Pontes, de donde procedía parte de su familia.