El Círculo Cultural, Recreativo y Deportivo de Perlío (no el Círculo de Fene) trata de sobreponerse al trauma de la detención de Miguel A.L.D. por pornografía infantil. Era el presidente de la sección de fútbol y trabajador de la contrata municipal que se ocupa del mantenimiento del campo, donde juegan los equipos de base y otros muchos de los clubes del sur de la ría. Julián Rico (Zubi), 37 años, entrenador y padre de un niño que juega en el club que presidía el detenido, es portavoz del grupo que ha asumido la tarea de reorganizar la institución y destituir al acusado.
-¿Cómo vivieron lo sucedido dentro del Círculo?
-Fue una sorpresa enorme. Un shock para todos. Al conocer la detención de Miguel nadie se lo creía. Ni padres, ni madres, ni los niños, ni la gente de otros clubes. Es que nadie hablaba mal de él, fue un shock.
-¿Por qué fue un shock?
-Porque llevaba años con nosotros, siempre amable y dispuesto a ayudar en todo.
-¿La policía estuvo también en las oficinas del club?
-No. Registraron solo el piso de Miguel y lo llevaron detenido al descubrir que tenía pornografía infantil en su ordenador, pero no miraron el ordenador de nuestra oficina.
-¿Les llamaron a declarar?
-Dos directivos estuvieron en la policía para ver las fotos que tenía y, afortunadamente, vimos que con el club no había nada y pudimos tranquilizar a los padres. Algunos pensaban que tenía instaladas cámaras en los vestuarios. Sí había hecho algunas fotos con su móvil en los vestuarios, pero de lejos y no como las que tenía de pornografía infantil, aunque claro, tampoco es legal que las haya hecho, porque son menores de edad.
zubi rico portavoz del círculo de perlío (fene), donde se destapó el caso de pedofilia