El exministro dice que se usaron grabaciones sin permiso

Enrique Clemente Navarro
enrique clemente MADRID / LA VOZ

GALICIA

13 mar 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

José Blanco no va a dimitir. Al menos por el momento. Solo renunciará a su acta de diputado si, una vez que el juez termine la instrucción del caso y se resuelvan los recursos pendientes, dicta un auto de apertura de juicio oral contra él. En ese momento, «haré lo que debo hacer, renunciar a mi escaño de diputado», dijo en una comparecencia en el Congreso, en la que leyó una declaración y contestó tres preguntas, tras conocer que la Fiscalía ha pedido su suplicatorio para juzgarlo por tráfico de influencias. El exministro de Fomento señaló que si el juez decide cursar esa petición pedirá a la Cámara baja que lo conceda y calificó de «sorprendente» que no se solicitara antes, tras su declaración voluntaria en el Supremo y una vez que se había tomado la decisión de iniciar un proceso prolongado de investigaciones.

El ex número dos del PSOE descalificó el escrito del fiscal, porque está realizado a partir de un informe de la UDEF que se basa en dos aspectos que no deberían tenerse en cuenta. Por un lado, en un peritaje que el juez denegó en su momento, pues rechazó que se nombrara un perito que analizase la licencia concedida a Azkar en Sant Boi. Por otro, en unas transcripciones de llamadas telefónicas que se realizaron sin autorización judicial.

Acusaciones falsas

En lo que respecta a la nave de Azkar manifestó que se limitó «a solicitar información en relación a un expediente atrasado en un proyecto del que dependían 400 empleos, sin presionar ni condicionar la voluntad de nadie». Blanco aseguró que ni siquiera habló con el alcalde de Sant Boi, que ni sabía quién era.

Explicó que durante los últimos meses ha solicitado de forma reiterada que se aparten de la investigación todos los informes realizados al margen de la autorización del instructor. Y apuntó a la UDEF al decir que «muchos retuercen la verdad para generar dudas y sospechas sobre mi conducta». Insistió en que la instrucción aún no ha concluido y que hay recursos que ha planteado pendientes resolver. Reiteró que las acusaciones de Jorge Dorribo son «total y rotundamente falsas» y resaltó que en el escrito de la Fiscalía no se la acusa de cohecho, lo que demuestra que no recibió dinero de él. Puntualizó que desde el primer día reconoció su relación de amistad con José Antonio Orozco y que se interesó por la situación de un expediente administrativo, pero no influyó, ni condicionó, ni presionó al alcalde de Sant Boi.

Blanco señaló que había comunicado su decisión a la dirección del partido en Galicia y a la federal, pero es solo responsabilidad suya. Confesó que después de su imputación ha reflexionado sobre «algún error o exceso que pude haber cometido en cuanto al respeto a la presunción de inocencia» y reveló que está escribiendo un libro en el que hablará de ello.