Solo el BNG enseña la puerta automáticamente a sus imputados

m. ch. santiago / la voz

GALICIA

05 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Nueve de cada diez gallegos creen que los políticos imputados judicialmente deben dimitir sí o sí, según una encuesta realizada por Sondaxe para La Voz. ¿Se corresponde esta generalizada corriente de opinión con el modo de proceder en estos casos de las cuatro formaciones con representación en el Parlamento autónomo? Con el de PP y PSOE, no. Con el del BNG, sí. Y con el de la incipiente AGE, no se sabe, porque aún no se ha visto en una de estas, si bien su coportavoz, Yolanda Díaz, da a entender que, al menos por su parte (Esquerda Unida), obraría como la ciudadanía quiere.

PP

En el contexto de la operación Pokémon, los populares han forzado la dimisión de uno de sus cuatro supuestamente implicados, el ya exalcalde de Boqueixón, Adolfo Gacio, y permitido la continuidad del resto: los regidores de Santiago, Ángel Currás, y O Carballiño, Argimiro Marnotes, así como la concejala compostelana de Educación, Rebeca Domínguez. ¿Por qué? Apelan los de la gaviota a sus normas internas, que sitúan fuera del ejercicio de la cosa pública, condenados al margen, solamente a aquellos imputados a los que, tras declarar, se les impongan medidas cautelares, por ejemplo, la fijación de una fianza para quedar en libertad.

PSOE

Al contrario que el PP, los socialistas no cuentan con una regla que aboque a la dimisión a sus cargos imputados, si bien aplican, «como norma no escrita», la misma doctrina que los conservadores: presunción de inocencia en todas las situaciones, respeto a la Justicia y cese solo si se dictan cautelares. Así, por la Pokémon, cayó el regidor de Ourense, Francisco Rodríguez, pero no el de Lugo, José Clemente López Orozco, ni el concejal de Cospeito (Lugo) Miguel Ángel Pico Yáñez.

BNG

Aunque no figura así explicitado en sus estatutos, el Bloque, por costumbre, reacciona a las imputaciones de los suyos enseñándoles automáticamente la puerta de salida. De esa manera, hubo de irse a su casa el edil ourensano Fernando Varela. Y por ello -porque los socialistas no los emulan en esto- también decidió romper los pactos de gobierno con el PSOE en Lugo y la ciudad de As Burgas.

AGE

La suma de EU y Anova se ha dotado ya de código de conducta, pero no aún de directriz ante procesos judiciales. No obstante, Díaz aboga por equiparar imputación a dimisión mecánica.