De Mesa se resiste a decir que fue solo Sors quien alejó el «Prestige»

Pablo González
Pablo González REDACCIÓN/LA VOZ

GALICIA

Atribuye también la orden a los asesores y al gabinete del director general

18 ene 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Como un oficial que da el parte del día. Resolutivo, escurridizo, seguro de sí mismo, a veces moderadamente desafiante y ciertamente asertivo. Así se mostró ayer el director de la Guardia Civil para hablar de su pasado como principal cabeza visible de la gestión del Prestige. Entonces era el delegado del Gobierno en Galicia pero, como ya declaró cuando fue desimputado en el 2003, las decisiones las tomaban otros. El era un «profano», «sin autoritas ni potestas», con un cargo que no le capacitaba para tomar ninguna decisión más allá de las playas.

Para muchos gallegos, él fue la imagen gubernamental de aquellos días. Pero Arsenio Fernández de Mesa se resiste a quedar para la historia como alguien que intentó ocultar el alcance de la marea negra. Tiene algo pendiente con aquellos días y dio la impresión de que llevaba años preparando este momento. Pero ni una sola expresión autocrítica salió de su boca.

Si en el 2003 tanto él como el capitán marítimo de A Coruña no dudaron en señalar al director general de la Marina Mercante como la persona que toma la decisión de alejar el petrolero para zafarse de la imputación, ayer eludió por todos los medios referirse a él por su nombre. O recurría a una genérica «autoridad marítima nacional» o se refería a los asesores y al gabinete del director general como los que tomaron la decisión. Alejandro Martín, abogado de Nunca Máis, se desesperaba descorchando al testigo.

- Las decisiones, según ratificó usted por dos veces en la instrucción, las tomaba López Sors.

- No, no. Las decisiones las toma la autoridad marítima nacional, que es el director general de la Marina Mercante y la Dirección General de la Marina Mercante. Y evidentemente quien representa a la autoridad marítima nacional y a la Marina Mercante es el director general.

- Vamos a ver. ¿El señor López Sors sí o no tomaba las decisiones? ¿Quién era el director general de la Marina Mercante en noviembre del 2002?

- El señor López Sors.

- ¿Pues quién tomaba las decisiones?

- El gabinete y los asesores que tenía con él el señor López Sors. El señor López Sors per se supongo que no tomaría la decisión. Tendría su gabinete de asesores, como el señor Nogueira declaró que tenía el suyo.

- En instrucción usted declaró que era él quien tomaba las decisiones, toda vez que usted dice que el organismo rector no es colegiado y no decide colegiadamente nada. Su respuesta fue que era al director de la Marina Mercante a quien le corresponde por sus competencias.

- Efectivamente, la autoridad marítima nacional.

Refugio y técnicos

Tras este interrogatorio modelo frontón, De Mesa recalcó que él no sabía absolutamente nada de cuestiones técnicas. Pero sí tenía claro que el barco estaba a apenas cuatro millas de Muxía y que lo que no quería la Administración era «un Costa Concordia» en Muxía, dijo en referencia al trasatlántico que encalló en Italia. Sobre el refugio, el exdelegado del Gobierno resaltó que el objetivo del Ejecutivo «era el cumplimento de la legalidad». En España, dijo, no había designados puertos refugio y la ley no permitiría dejar entrar al Prestige en un puerto en su estado. Pero a él no le competía el asunto del refugio y quienes discutían estos aspectos «no estaban en mi despacho».