El ERE de Paradores afecta a casi la mitad de su plantilla en Galicia
GALICIA
El ministro de Industria asegura que el cierre de hoteles no será definitivo
05 dic 2012 . Actualizado a las 18:30 h.El expediente de regulación de empleo (ERE) presentado por Paradores de Turismo, que prevé la clausura de los establecimientos de Verín y Ferrol y cierres temporales en los de Monforte, Santo Estevo, Vilalba y Tui, supondrá el despido de 85 de los 427 trabajadores de la cadena pública en Galicia y la modificación de las condiciones contractuales de otros 119 empleados, que pasarán de fijos a fijos discontinuos.
En total son 204 personas afectadas, el 47 % de la plantilla en Galicia. En toda España serán 644 despidos (569 del personal de los siete hoteles que se cerrarán y otros 75 de los servicios centrales) que, según la propuesta de la dirección, recibirán una indemnización equivalente a veinte días de salario por año de servicio con un máximo de una anualidad, el mínimo que establece la legislación laboral actual. Además, 867 trabajadores tendrán que irse al paro los meses en los que cierren temporalmente otros 27 paradores.
«Única alternativa»
El ministro de Industria, José Manuel Soria, justificó ayer el ERE asegurando que es la única alternativa «a la suspensión de pagos», y añadió que la clausura de los siete paradores no será definitiva. Soria explicó que Paradores acumuló el año pasado 113 millones en pérdidas.
Los trabajadores, que ayer apenas habían tenido tiempo de empezar a analizar los cerca de 3.000 folios de la propuesta que les facilitó la dirección, consideran las medidas «desproporcionadas e inxustas», en palabras de Jorge Carneiro, delegado de personal por CC. OO. en el Parador de Baiona y miembro del comité nacional intercentros. «Hai un problema económico, pero hai outras solucións menos drásticas. O que nos tememos é que todo isto se fai para facer limpa e dar entrada ao capital privado na empresa», dijo Carneiro, para señalar la incongruencia de que se planifiquen reducciones de plantilla en establecimientos rentables, como los de Santiago y Baiona, y que otros que dan pérdidas queden al margen tanto de los despidos como de los cierres temporales.
Rita Cidre, delegada de personal en Baiona por la CIG, sostiene esa misma tesis: «É normal que pensemos nun posible intento de privatizar a xestión, porque as medidas non teñen lóxica ningunha. Todos os sindicatos estamos dacordo en que non se entenden os criterios da toma de decisións nin no que se refire aos peches nin aos despidos». José Antonio Boullosa, secretario de Organización de la Federación de Comercio e Hostelería de UGT Galicia, confirma esa versión: «Se trata de hacer limpieza y dejar la tarta bien jugosa y sin cargas sociales».
Fuentes de la dirección de Paradores aseguraron ayer que la propuesta no supone una decisión en firme, y que la decisión de cerrar establecimientos solo será definitiva una vez concluya la negociación con los sindicatos el próximo 2 de enero.