El PP solo pudo contar con el apoyo de UPyD en su propuesta de modificar el Código Penal para incluir al furtivismo. Su portavoz, Toni Cantó, incluso habló de mejorar la iniciativa para incluir los daños medioambientales que ocasiona el furtivismo. Fue la única voz de apoyo. Izquierda Plural y PSOE tomaron la palabra para justificar, en algún caso con socarronería, su negativa a apoyar esa «criminalización». «Creí que se quería actuar contra grandes delincuentes, pero según ha dicho en su intervención son personas que solo llevan un rastrillo y una cubeta», intervino José Luis Centella, de Izquierda Plural, que conminó al PP a «acabar con el paro y con este problema en vez de tomar medidas jurídicas».
Tampoco el PSOE cree que tipificar el furtivismo como delito sea la mejor solución para acabar con la lacra que afecta al marisqueo. Su portavoz de Pesca, Laura Seara, arremetió contra la manía de los populares de «ir corriendo al Código Penal» cuando hay un problema, ya sea «la lucha contra el fuego, la política de menores o el furtivismo», el castigo penal es siempre «la casa común» del PP.
Seara conminó a atajarlo incrementando los recursos materiales y humanos -«¿cómo pretende erradicarlo con dos mariscadoras obligadas a hacer guardias a la fuerza?», dijo- y a resolver problemas paralelos, como el paro o, citando el caso concreto de O Burgo, el problema de chabolismo que hay en A Pasaxe. Por tanto, la iniciativa «es errónea».