El juez del crimen del Cash Récord de Lugo quiere revisar 317 armas de guardias civiles

Xosé Carreira LUGO / LA VOZ

GALICIA

El caso del doble asesinato cometido en O Ceao se reactiva 18 años después

20 nov 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Un juez lucense ha requerido a la intervención de armas de la Comandancia de la Guardia Civil la entrega de un listado de 317 pistolas Star de 9 milímetros parabellum con vistas a una posterior peritación que también reclama el fiscal. La finalidad es tratar de saber si con alguna de ellas pudo ser cometido, hace 18 años, el doble crimen del Cash Récord de O Ceao. Jamás se llegó a saber nada del asesino o asesinos de la cajera de un supermercado mayorista María Elena López Lens y del reponedor Esteban Carballedo Teijeiro. Los hechos sucedieron en abril de 1994. Hasta ahora nada se supo porque la investigación fue una auténtica chapuza. Tanto es así que la policía ni tan siquiera llegó al lugar con carretes de fotos y, además, no tomó declaración a testigos clave.

Las constantes denuncias públicas, manifestaciones e incluso huelgas de hambre llevadas a cabo por familiares de las víctimas posibilitaron que el asunto siga vivo judicialmente. Alberto Benéitez Antón, titular del Juzgado de Primera Instancia número 1 de Lugo, es quien lleva ahora el peso de la instrucción.

El juez dispone de la relación numérica de las pistolas Star BM y Star 30M de la Guardia Civil, de los nombres de quienes las tuvieron en titularidad en su momento y de quienes las tienen ahora. A pesar de que el arma utilizada para cometer el doble asesinato era del mismo modelo y de que únicamente era utilizada por los miembros y cuerpos y fuerzas de seguridad, resulta que a ninguno de los investigadores se le había ocurrido en 18 años pedir la relación.

El fiscal jefe, Javier Rey, había sugerido al juez que pidiera la lista con vistas al peritaje. Este trámite, que según algunas fuentes tendrá que ser realizado en Madrid, podría permitir que se supiese si con alguna de las pistolas se hizo el disparo.

El atestado de la policía dice que los disparos que acabaron con las vidas de María Elena y Esteban fueron efectuados con una sola arma y que esta es de la marca Star, modelo BM 9 milímetros parabellum, «de las utilizadas por las fuerzas de seguridad». Reseña la policía que carece de antecedentes de balística.

En un monte

Adónde fue a parar el arma homicida es una incógnita. El atestado dice que pasado el tiempo halló una, atribuible a un sospechoso. Sin embargo, su examen dio negativo en relación con la que pudo haber sido usada en O Ceao y también con una bala hallada en un pinar de Ramil.

La jueza Pilar de Lara Cifuentes (que investiga los casos Carioca y Pokémon) ha remitido a su colega encargado de la instrucción del doble crimen un detallado informe en el que le cuenta, entre otras cuestiones, que una persona que compareció en su juzgado declaró que en el año 2005, cuando estuvo ingresado en prisión, compartió celda con otra persona que le contó que, en cierta ocasión, cuando iba en un coche en compañía de un amigo suyo y de la novia de este, le comentaron que eran seguidos por la Guardia Civil y que tenían que despistarlos. Pararon el coche y se deshicieron de una pistola de 9 milímetros. El ocupante del vehículo preguntó por el asunto y el conductor le contestó: «Es mejor que no preguntes, si no quieres problemas. Esta es la pistola del Cash Récord [establecimiento donde se produjo el doble asesinato en 1994]». La persona que hizo la declaración en el juzgado de Pilar de Lara explicó que el arma fue escondida en un monte en Vilalba. Pasado el tiempo fue al lugar, pero no consiguió localizar la pistola.

Manuales de montaje

En su momento, fue investigado un guardia civil lucense que se encontraba destinado en la población catalana de Vich, por si fuera poseedor de munición o armas. En un registro que le efectuaron en el domicilio que tenía en el acuartelamiento aparecieron numerosas piezas de armas para reconvertir. Disponía incluso de manuales de montaje.

A la nueva fase de la instrucción del caso del doble crimen de O Ceao también fue incorporada la declaración que había efectuado en su momento un policía local que encontró a un vendedor de droga que le manifestó que le habían ofrecido pegar «un golpe en O Ceao» y que le pusieran en la mano dos pistolas.